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El apoyo que el ex presidente Eduardo Frei entregó al actual mandatario, Sebastián Piñera, en su decisión de rechazar el Pacto Migratorio de la ONU, incomodó a la Democracia Cristiana. “¿Cuántos han llegado a Chile en los últimos dos años? ¿Un millón? Un millón. Entonces, ¿de qué estamos hablando? Está lleno…”, comentó el ex jefe de Estado en conversación con Cooperativa.

En entrevista con 360°, el diputado de la DC Gabriel Silber dijo que las declaraciones de Frei le dan al partido “una pena amarga” porque hace eco de algunos mitos, como que la escalada migratoria sucedió en los últimos años cuando, en realidad, habría sido más bien progresiva.

Hay una desalineación política deliberada porque conoció las declaraciones de su partido y de la oposición. Uno no entiende la tozudez de ponerse al frente de su coalición en un tema tan sensible”, comentó.

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El parlamentario también aprovechó de criticar al Ejecutivo por la determinación, afirmando que “hay rasgos de populismo y mucho cortoplacismo en esta negativa de suscribir el pacto”. Incluso acusó “visos de neopinochetismo” y apelación al “chovinismo”.

Por esos mismos motivos situó a la DC, que en otras circunstancias se ha mostrado cercana al Ejecutivo, lejos de la derecha, y afirmó que su relación con el gobierno se basa en que “la DC debe tener desde la oposición banderas que en algún momento se perdieron, como haber abandonado el tema del orden público, la seguridad ciudadana, el emprendimiento y entender que lo público no necesariamente es lo estatal”.

A la vez, hizo una autocrítica respecto al gobierno de la Nueva Mayoría y reconoció que la administración anterior estuvo “al debe” en la materia porque “se tendió a minimizar lo que era la ola migratoria”.

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