La bancada de diputados del Partido Republicano (PLR) anunció que votará este martes en contra del proyecto que busca reducir la jornada laboral de 45 a 40 horas semanales.

Según el diputado Juan Irarrázaval, “tanto el oficialismo como la oposición han entusiasmado a la gente con una medida populista que más temprano que tarde terminará perjudicando a la gran mayoría“.

“El impacto en la cesantía podría ser brutal considerando que muchas Pymes privilegiarán prescindir de ciertos trabajos para así cumplir con la futura legislación. Es una mala política pública que dejará sin trabajo a muchas familias, ya que afecta directamente el desarrollo de esta fuente laboral”, agregó.

“El discurso que mejorará el tiempo para la familia es una ilusión”

El parlamentario también afirmó que “sorprende que las medianas y pequeñas empresas no fueran consideradas en la discusión y que solo se haya negociado con los grandes empresarios que tienen muchos más espaldas para hacer frente a esta modificación laboral, y que incluso, están disponibles a que les suban los impuestos. Esa no es la realidad de las Pymes, que son las que dan formalmente la mayor cantidad del empleo en Chile”.

“Las Pymes ya vienen golpeadas por los efectos nocivos de la pandemia y por el actual escenario estanflacionario, y una eventual aprobación de este proyecto terminará por hundir a la mayoría de estas. Mientras que para un gran empresario esta iniciativa significará un alza de costo de 4%, para una Pyme esta alza puede llegar hasta el 50%. Es irracional que aun sabiendo que las pequeñas y medianas empresas representan el 53% de la generación del empleo de nuestro país, ahora se les quiera castigar de manera tan brutal. Este tipo de políticas deberían aplicarse solo en la medida que la nación progrese, donde existan ciertos equilibrios en los umbrales de productividad, de desarrollo y avance, pero este no es el caso de Chile”, continuó.

Finalmente, el diputado aseguró que “en la situación actual y como está presentada esta ley, hará que los sueldos no suban y se estanquen. Esta medida incentivará que los trabajadores busquen otras fuentes de ingreso por lo que el discurso de que mejorará el tiempo para la familia es una ilusión“.

“Al revés, va a existir una sobreexplotación laboral por dos o más trabajos. La gente requiere trabajo de calidad precisamente porque quiere lo mejor para su familia, y este no será el caso porque se le exigirá al trabajador con el mismo salario tener que cumplir con sus obligaciones en menos tiempo, sin contar que incentivará aún más la informalidad laboral”, sentenció.

¿Qué propone el proyecto?

El proyecto fue ingresado al Poder Legislativo en marzo de 2017 en moción parlamentaria por parte de la actual ministra de la Secretaría General de Gobierno, Camila Vallejo, cuando era diputada de la República, junto al respaldo de otros parlamentarios, como el de la diputada Karol Cariola y del actual senador Daniel Núñez.

Si llega a recibir lo que parece ser una inminente luz verde en la Cámara Baja, su implementación se daría de forma gradual con plazo tope en 2028.

De esta forma, en 2024 la jornada bajaría a 44 horas, en 2025 lo haría a 43 horas y así hasta llegar a las 40 horas en 2028.

Asimismo, se establecen sistemas excepcionales de trabajo y el sistema de jornada cuatro por tres (4×3), que consideran áreas como minería, pesca o turismo. Por otra parte, se regulan las horas extraordinarias y su compensación, entre otros puntos.

La norma, que en concreto modifica el Código del Trabajo, considera el impacto en la salud y bienestar de los trabajadores. El descanso y la recuperación disminuye la fatiga, los errores, la accidentabilidad, el ausentismo y conflictos entre vida personal y laboral.

También, explican que las jornadas prolongadas tienen consecuencias negativas a corto y largo plazo. Se ve afectada la salud humana como la seguridad en el lugar de trabajo, lo que se manifiesta en menor productividad.

“¡Más de 4 millones de trabajadoras, trabajadores y sus familias podrán mejorar su calidad de vida gracias a este proyecto de ley que cuenta con apoyo transversal!”, expresaron desde el Ministerio de la Secretaría General de Gobierno.

¿Qué pasa si se aprueba?

El proyecto necesita mayoría simple para ser aprobado por la Cámara de Diputadas y Diputados. En caso de ocurrir, será despachado por el Congreso Nacional y quedará en condiciones para ser promulgado por el presidente Gabriel Boric y con ello convertirse en ley de la República.

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