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Jessica Quiroz, fundadora del Centro San Alfonso, no sabía cómo ponerse de pie. En el recinto brindaban terapias especializadas para niños con autismo, contaban con jardín infantil y un after school con un variado equipo profesional. Pero la crisis sanitaria de COVID-19 hizo desaparecer de a poco el trabajo de años.

“Cuando nos fuimos dando cuenta que esto se alargaba, comenzamos a vivir los estragos de lo que significó. Las familias se comienzan a retirar, obviamente hay un servicio que no podíamos brindar”, lamentó Jessica.

Para enfrentar esta situación comenzaron con teleterapias, clases por zoom, talleres de yoga y zumba, entre otras alternativas. Dice que no ha sido fácil, pero siguen luchando y lo hacen con la tecnología. Hoy cuentan con un sitio web y una agenda virtual para organizarse y dar a conocer su trabajo.

Destaca que la presencia online ha permitido que “la gente nos conozca más, que sea más fácil de ordenar la agenda a partir de este sistema digital. Es lo que tienen que hacer todas las personas”. Pero Jessica está lejos de ser la única.

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El matrimonio de Karla Donoso y Pablo Nicola vivió una experiencia similar. Ambos son creadores de una línea de conservas que partió con salsas de tomates, para luego incursionar en novedosas recetas como el ají caramelizado, tomate asado y pesto de perejil, entre otros. Marzo iba a ser una vitrina para sus productos, pero el coronavirus tocó la puerta y los dejó a mitad de camino.

Estábamos preparados para una vendimia y varias ferias. Eso quedó en stand by”, lamentó Karla, una de las dueñas de Savira.

Pero de lo negativo decidieron sacar provecho y aventurarse con la tecnología. Hoy están en un proceso de digitalización donde sus clientes pueden comprar más fácilmente a través de su página web. Han mejorado las ventas y están llegando incluso a más personas en todo el país.

Pablo, el otro fundador, dice que “es una posibilidad de mostrarle a las pymes, que en este momento no lo están pasando bien, que podemos salir adelante“.

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Así también lo cree Daniela Gutiérrez, coach de Digitalizados Entel, quien además detalló que “es un trabajo colaborativo: por una parte nosotros podemos apoyarlos con tecnología para acelerar sus ideas, hacer más atractivo su negocio, pero también hay un rol importante de la pyme misma, que quiera sumarse a este desafío”.

Estos emprendedores están siendo asesorados por Entel en la búsqueda de nuevas herramientas tecnológicas. Es la digitalización al servicio de las pymes en momentos donde es importante reinventarse para expandir horizontes.

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