El Ministerio de Salud informó que ya hay casos confirmados de coronavirus en Chile con la variante BF.7, la que fue detectada en China y proviene de la variante Ómicron.
Cabe señalar que por este motivo, se extendió la alerta sanitaria por el COVID-19 hasta marzo de 2023. La medida tiene como finalidad la aplicación de políticas extraordinarias en la Red Asistencial y también recursos para enfrentar posibles casos graves de la enfermedad.
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Esta cepa tiene una alta capacidad de propagación en adultos mayores y personas con patologías crónicas, además de causar mayor afectación en las vías respiratorias, sobre todo en pulmones.
Respecto a la variante BF.7, la ministra de Salud, Ximena Aguilera dijo que esta tiene “una capacidad mayor de transmisión, lo que implica que finalmente va a llegar a todos lados y que es lo que hemos visto que China. A la larga se ve que los virus no reconocen fronteras, por lo tanto, no es que nosotros vayamos a impedir que ingrese una nueva variante, lo que hacemos es tratar de detectar lo que está ocurriendo”.
En esa línea, llamó a la población a mantenerse informada. “Nosotros no hemos terminado la pandemia, la pandemia sigue ocurriendo, seguimos en una emergencia de salud pública de interés internacional y, por lo tanto, todo lo que nosotros hemos hecho como autoridades y como hicieron las autoridades anteriores para proteger a la población sigue siendo vigente”, expresó.
Asimismo, la secretaria de Estado subrayó la importancia de las medidas de precaución para evitar la propagación del virus.
“El vacunarse, que es lo que nos ha permitido el seguir navegando por esta situación con menor impacto en la salud de las personas; si uno tiene síntomas respiratorios, usemos mascarilla para proteger a las otras personas del contagio; autotestearse; autoaislarse o si no tiene ese recurso recurrir a la red asistencial y seguir las recomendaciones de los profesionales respecto al aislamiento”, zanjó.
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