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Como una “visita virtual” ha denominado Gendarmería el plan piloto de videoconferencias que se ha implementado en varios centros penitenciarios del país, con el fin de que los internos se comuniquen con sus familiares y eviten riesgos de contagio de COVID-19.
La medida fue implementada inicialmente en el Centro de Detención Preventiva Sur, siendo replicada en varios penales de Chile. Si bien en la mayoría se han instalado sistemas de videollamadas a través de computadores, en algunas unidades se cuentan con celulares proporcionados por familiares de internos.
“Los dispositivos móviles son recibidos bajo sistema de encomiendas y se utilizan única y exclusivamente para realizar videollamada entre el privado de libertad y su pariente; siempre custodiado por nuestro personal. Al finalizar el contacto virtual, el equipo es guardado por un funcionario”, explicaron desde Gendarmería.
La institución también detalló que el sistema de celulares está disponible en los siguientes penales: CCP Biobío, CPF La Araucanía, CDP Pitrufquén, CDP Angol, CCP Molina, CP Valdivia y CDP Santiago 1.
El Director Nacional de Gendarmería, Christian Alveal, aseguró que “este tipo de medidas van en directo beneficio de todos, internos y funcionarios, para disminuir el riesgo de contagio, pero también para mantener el contacto tan necesario con los familiares y seres queridos de la población privada de libertad”.
En tanto, Óscar Henríquez, jefe del Departamento de Informática, dijo que “tenemos varios equipos con cámara integrada, con redes internas y externas. Tenemos conexiones con todas nuestras unidades penales, con programas instalados para que los internos puedan hablar con sus visitas“.
Cabe hacer presente que la iniciativa de implementar videollamadas en los centros penitenciarios responde a la suspensión de las visitas presenciales en estos recintos como medida de prevención frente al COVID-19.
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