Destacó los desafíos de su nuevo cargo y recalcó que las personas deben estar al centro de las preocupaciones del máximo tribunal.
Este lunes, Sergio Muñoz asumió como el nuevo presidente de la Corte Suprema en el Palacio de Tribunales. A sus 56 años, Muñoz investigó el caso del Banco Riggs y destacó la labor de su antecesor, Rubén Ballesteros. Además destacó los desafíos de su función, expresando además que en el rol principal de la Corte Suprema es fundamental “la máxima protección, de todos los derechos, y de todas las personas, con un libre y amplio acceso, sin exclusiones, mediante un trato digno e igualitarios para todos los habitantes”.
“Hemos sido capaces de cambiar ciertos paradigmas sin traumas ni complejos, hemos entendido que la transparencia es una herramienta que hoy la sociedad y la legislación nos exige, y por lo mismo hemos variado de entender que todo era reservado a decir hoy que todo es público y está a disposición de la gente y que las excepciones es la reserva”, recalcó Muñoz.
Ballesteros, quien deja el cargo, por su parte destacó en su discurso de salida la labor que pudo llevar a cabo a la cabeza del máximo tribunal a partir de la colaboración de los jueces, funcionarios y empleados.
“Le deseamos al Presidente, el señor Sergio Muñoz, un fructífero período para concretar las pretensiones que el poder judicial ha reclamado por años y para continuar fortaleciendo y perfeccionando la forma en que se administra justicia en nuestro país”, recalcó Ballesteros.
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