El año 2004 los chilenos veían cómo entraba en vigor una nueva Ley que prometía cambiar la vida de los chilenos:la conocida Ley de divorcio.
Los detractores de la legislación estaban preocupados por la unidad de la familia, mientras que sus adherentes la veían como un signo de desarrollo y avance.
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A tal punto llegó la discusión que fue necesario aplicar un intenso lobby desde La Moneda para impedir que la aprobación del proyecto se siguiera dilatando, permitiendo así la separación vincular de los cónyuges.
A 14 de años de hito en la historia reciente del país, el sitio Emol publicó los datos proporcionados por el Registro Civil en torno a cómo ha sido el comportamiento de chilenas y chilenos en torno al matrimonio, revelando curiosos datos.
El más llamativo de todos es que hasta diciembre del año pasado, un total de 1.530 parejas (3.060 personas) se han divorciado y luego vuelto a contraer matrimonio entre ellos mismos por segunda vez.
El informe señala además que diez personas se han divorciado y casado con su ex cónyuge en tres ocasiones más.
Si bien estos casos representan sólo el 0,17%, llama la atención que, pese al desgaste que representa el trámite de divorcio, un número considerable de personas haya decidido volver a legalizar la relación con alguien de quien ya habían resuelto separarse, destacó el medio citado.
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“Es súper llamativo que decidan hacer otra vez el vínculo formalmente y yo creo que tiene que ver con que las relaciones de pareja sin un contrato matrimonial no están tan protegidas en la sociedad, en todo lo que tiene que ver con los bienes, con las herencias, con la salud, que uno es carga del otro, muchas veces tiene que ver con lo económico”, comentó al citado medio la psicóloga María Ignacia Veas, de la Unidad de Promoción de la Salud Psicológica de la Universidad de Santiago.
De acuerdo con información publicada por el diario español ABC, esta tendencia iniciada en los años 60 en EE.UU. cuenta con casos tan sonados como los repetidos “sí, quiero” y “ahora no te quiero ni ver” de personajes del mundo del espectáculo como Liz Taylor y Richard Burton, y que años después simularían Melanie Griffith y Don Johnson, Pamela Anderson y Rick Salomon, Eminem y Kimberly Anne Scott, Jean-Claude Van Damme y la escultural Gladys Portugues.
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