Los altibajos en la relación Chile – Argentina

Cristina Fernández vive una situación particular con el gobierno Chileno, por una parte, sustenta un mutuo respaldo por la demanda territorial de las Islas Malvinas o Falklands y por otro, las trabas que ha impuesto a los impetradores por parte de Argentina, han generado múltiples críticas.

Las condiciones han cambiado, ya que el gobierno argentino comenzó a controlar todas las importaciones, es decir, las empresas deben notificar informando el producto que se quiere ingresar al país para ser investigado exhaustivamente con el objetivo de recibir su aprobación o rechazo. De las 16.500 solicitudes de importaciones, sólo se aprobaron 4.700, siendo aún tramitadas más de 9 mil. La idea, según especialistas, es cuidar los dólares que circulan en el país trasandino y así, lograr las metas económicas para el 2012.

El diputado, Jorge Tarud, miembro de la comisión de Relaciones Exteriores, sostuvo que esta acción no es solamente realizada a Chile, sino que también a toda la comunidad internacional "Todos van a reclamarle a Argentina, por estas medidas absolutamente retrógradas que van en contra del libre mercado", manifestó el parlamentario.

En Chile, se evalúa seguir caso a caso los problemas de los exportadores. En torno a este hecho, el ministro de Economía, Pablo Longueira, ratificó que "los sectores productivos sienten que las medidas que están tomando el vecino país, afectan la libre competencia".

Este problema, es sólo uno de los conflictos que sostienen ambas naciones. El corte de gas natural a Chile, la definición de los límites de Campos de Hielo Sur, y el respaldo de Argentina a las demandas marítimas de Perú y Bolivia, son algunos de los conflictos recientes, sumados a esto, el reclamo por la extradición de Galvarino Apablaza.

A pesar de esta distancia, expertos sostienen que entre Chile y Argentina, existe una sólida relación bilateral, existiendo incluso, acuerdos bélicos.