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Se trata de uno de los temas que más controversia genera en la ciudadanía. Hablamos de la Ley Reservada del Cobre, que destina parte de las ganancias de la cuprífera estatal para el financiamiento de las FF.AA. y la compra de armamento en tiempos de paz.

Ahora, la discusión en torno al tema se centra en el anuncio del gobierno para eliminarla en forma definitiva y establecer un mecanismo distinto para financiar la compra de insumos bélicos para las Fuerzas Armadas.

Al respecto, el analista político y conocedor del tema, Claudio Fuentes, señaló que “el proyecto de ley no solo regula la Ley Reservada del Cobre, sino que regula el financiamiento de la defensa en su conjunto”.

Sobre los alcances de esta Ley, Fuentes dijo que el proyecto aprobado por la Cámara y con las indicaciones del Ejecutivo, los recursos permanentes se mantienen. “El piso mínimo establecido por Pinochet se mantendría si el proyecto se aprueba tal cual en el Senado”, señaló.

Sobre la compra de material bélico, el experto dijo que “se transfiere a un nuevo sistema”, el que tiene dos fondos, “el plurianual que cada cuatro años se va a planificar para la compra y adquisición de material bélico”, descartando que “no existe en el mundo en democracia ningún país que tenga pisos mínimos para la adquisición de material”, señalando que se trataría de una anomalía.

El encargado de financiar este cobro será el Estado, donde se establece un piso de un 70% de lo gastado entre 2010 y 2017. La sorpresa, dijo el académico, es que, en este período, “el precio del cobre se mantuvo muy alto y por lo tanto el piso será necesariamente alto”.

Sobre el proyecto y sus mecanismos de funcionamiento, Claudio Fuentes señaló que “existe un problema”, ya que, según dijo, lo complicado del caso “es la gobernanza de este fondo plurianual”.

“Se establece un consejo asesor que será un comité técnico nombrado por el presidente, el ministro de defensa y hacienda”, según las indicaciones hechas por el Ejecutivo, dijo sobre el tema.

“El problema con eso es que sabemos que, en el tema de la industria de la defensa, el mercado más grande de venta de armas en el mundo, el lobby es feroz y si no se regula quienes son esas personas, vas a tener terribles presiones”, señaló.

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