El serbio Viktor Troicki hizo un verdadero papelón tras perder ante el español Albert Ramos por 3-6, 6-3, 6-3, 2-6 y 6-3.
Cuando su rival sacaba para el partido, un servicio fue cantado fuera pero el juez de silla vio otra cosa. Al cambiar el cobro, el serbio enloqueció y le fue a mostrar descontrolado la pelota, la que tiró afuera del estadio ganándose una advertencia.
Tras perder el punto siguiente y el partido, se fue con todo contra el árbitro y lo tildó como “el peor del mundo”. Se espera una sanción para el jugador.
Troicki ya había sido sancionado por doce meses en 2013, pero esa vez fue por dopaje en el Masters 1000 de Montecarlo.
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