“Espejito, espejito mágico”, ¿cuál es el mejor remake de Blancanieves? Este libro busca revivir al clásico con un giro inesperado

Por Arelí Zúñiga

13.04.2025 / 18:43

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La novela parte desde una base familiar: Tras la muerte de su madre, Blancanieves queda bajo el dominio de su madrastra y tía, la Reina Malvada, Ingrid, quien se apodera del reino y la somete a una existencia llena de control y amenazas. Ideal para lectores jóvenes que buscan una aventura ligera y novedosa, la obra de la estadounidense Jen Calonita, intenta dar un nuevo aire a la conocida y clásica historia, aunque con escasa resonancia para quienes esperan algo más desafiante.


En un panorama editorial saturado de versiones reinventadas de clásicos, Espejito, espejito mágico: Un giro inesperado, de Jen Calonita, escritora con amplia trayectoria en novelas juveniles, en colaboración con Disney, llega como una nueva promesa para refrescar la historia de Blancanieves. Sin embargo, aunque plantea ciertos giros narrativos interesantes, el libro no logra romper del todo con el molde del que intenta escapar.

La novela parte desde una base familiar: Tras la muerte de su madre, Blancanieves queda bajo el dominio de su madrastra y tía, la Reina Malvada, Ingrid, quien se apodera del reino y la somete a una existencia llena de control y amenazas.

Cuando su vida corre peligro, la joven princesa inicia una travesía para recuperar lo perdido, acompañada de aliados improbables; unos enanitos desconfiados, un príncipe del pasado y una figura misteriosa con lazos al ayer.

Narrativa con buen ritmo, pero sin profundidad emocional

Lo mejor del texto está en el dinamismo de la escritura. Calonita construye una historia que fluye con agilidad, ideal para lectores jóvenes que buscan una aventura con elementos conocidos pero envuelta en una atmósfera novedosa. En ese sentido, el libro tiene un público bastante bien definido; jóvenes, a partir de los 14 años.

Es evidente que la autora sabe cómo manejar la acción y estructurar capítulos que mantienen al lector avanzando sin pausa, con saltos temporales ordenados y coherentes, que aportan ritmo sin causar confusión. Las páginas saltan a través del tiempo, pero en orden cronológico.

En concreto, la autora cuenta dos historias -puede que sean más, pero dos son las principales- en paralelo, pero sin provocar confusión al lector, no deja espacios que puedan malentenderse y todos los capítulos, aunque mantienen una continuación en la línea narrativa de la historia, finalizan de una manera agradable.

En términos prácticos, el libro se lee bastante fácil, son 300 páginas que se pasan volando si el lector se concentra lo suficiente, ya que hay mucha acción y escenarios paralelos, por lo que existe la sensación de que hay otros sucesos ocurriendo, más allá de la historia principal; la disputa Blancanieves vs. Reina Malvada.

Los personajes: Cierta novedad y una historia cliché

Sin embargo, este despliegue narrativo contrasta con una construcción de personajes un poco decepcionante.

Blancanieves, diseñada para ser una heroína resiliente, carece de profundidad emocional. Su evolución parece más dictada por la necesidad del guion que por un desarrollo real del personaje.

No hay una transición creíble entre la joven víctima y la princesa decidida que vuelve a luchar por su reino; el cambio es abrupto y, por momentos, poco convincente. Aunque se entienden estos cambios, en términos reales no hay mucha conexión, ni siquiera con la historia original.

De hecho, es irónico que la Reina Malvada —aunque tampoco completamente lograda— tenga más razones argumentales para sus actos que Blancanieves para su transformación.

Aun así, el retrato de la villana se queda en lo superficial; su historia podría haber sido una oportunidad para humanizarla, pero el libro opta por mantenerla en el estereotipo de maldad sin matices.

La historia de los padres de Blancanieves es un poco más detallada. En un primer vistazo, no se logra entender la desaparición de estos en la historia, pero de a poco el lector logra comprender ciertas acciones.

Sin embargo, y alerta de spoiler: el destino y lo sucedido con el padre de Blancanieves es francamente decepcionante. Pero como se sabe, esto no es nada anormal, teniendo en cuenta que esta historia está llena de clichés.

Por otro lado, se encuentra Henri, el príncipe y uno de los vuelcos más inesperados narrativos de esta historia -aunque se adelante su destino en la sinopsis del libro-.

Es francamente fascinante -e inmersivo- la forma en la que la autora utiliza este recurso.

Recordemos que en la historia original su injerencia es mínima, incluso hasta pasiva, pero en este libro, el personaje es protagonista de uno de los momentos más emocionantes de la obra, pero no por sus propias acciones, sino por la influencia que logra generar en otros, principalmente en la princesa protagonista.

La relación -vínculo- aparénteme amoroso que mantiene Henri con Blancanieves alimenta mucho una expectativa más bien platónica. Para los fanáticos de los romances sutiles y juveniles, esta situación es bastante emocionante.

La dinámica entre ambos está bien construida por la autora, ya que genera cierta conexión con el lector, además, ¿a quién no le gusta una buena e inocente historia de amor, en medio de una trama oscura y repleta de secretos?

Por otro lado, Anne, la amiga y confidente de Blancanieves -porque toda heroína necesita una mejor amiga, ¿no es así?-, cobra vital importancia durante las escenas de acción y drama de la novela. Su incursión es un poco cliché -como la mayoría de los sucesos en el libro- pero su presencia genera una especie de respaldo a las acciones de la protagonista. Su carisma y personalidad hacen que este personaje sea muy valorable.

Finalmente, están los siete enanitos, quienes son -francamente- los personajes más carismáticos y graciosos del libro. Un buen complemento para la el desarrollo propio de la historia de Blancanieves, obviamente carecen de originalidad en términos de esencia, ya que en la mayoría de las escenas se apegan mucho a la historia original, pero es evidente que son más que imprescindibles. Por lo que el recurso fue aprovechada en su totalidad por la autora.

¿Otro remake de Blancanieves? Una historia que entretiene, pero no desafía

Espejito, espejito mágico, es entretenido, especialmente para quienes se inician en la literatura fantástica y gustan de los cuentos de hadas con toques modernos. Pero para lectores más exigentes, acostumbrados a reinterpretaciones que realmente cuestionan los cánones del cuento clásico, la novela se queda a medio camino.

Los errores ortográficos presentes en la edición (posiblemente atribuibles a la traducción) son un detalle que no pasa desapercibido y restan valor al conjunto. Aunque el formato narrativo —con dos líneas temporales que corren en paralelo— es uno de los puntos más sólidos de la obra, no es suficiente para compensar la falta de fuerza emocional en los personajes principales.

En conclusión, Calonita ofrece una versión ligeramente diferente del cuento tradicional, con buena estructura y acción constante, pero que falla en dotar de alma a sus protagonistas.

En un momento en que Disney y el universo de las princesas están bajo el escrutinio del público —sobre todo tras la recepción negativa del nuevo live action de Blancanieves y la polémica en torno a su protagonista, Rachel Zegler,— esta novela parece más una extensión de la fórmula clásica que una verdadera reinvención.


*Nota de la autora de la reseña: Me entretuve mucho leyendo este libro, como fanática férrea y autoproclamada de Disney y de sus productos en general, disfruté más de lo que esperaba esta obra. Sin embargo, al ser completamente honesta la respecto, no creo poder recomendarla a todos. Como mencioné antes, el público y nicho de esta obra está bastante definido, por lo que se puede entender como una lectura con proyecciones -un poco- limitadas. 

Espejito, espejito mágico: Un giro inesperado

  • Título: Espejito, espejito mágico: Un giro inesperado.
  • Autor: Jen Calonita
  • Editorial: Planeta Junior
  • Año: 2025
  • Precio: $ 16.900
  • Traductor: Marta García Madera
  • Número de páginas: 312