Lo que para uno es una planilla de texto, para otro es una red social oculta. Y eso no solo habla de inteligencia digital, sino también de una nueva forma de entender la colaboración.
Mientras muchos siguen viendo Google Docs como un Word online para tareas o trabajos grupales, los más jóvenes —esos mismos que inventaron el término rizz y que editan videos en TikTok como si fueran Spielberg— lo están usando para algo mucho más creativo: chatear, conspirar y colaborar en modo incógnito.
Sí, en plena era de los mensajes cifrados, hay estudiantes que prefieren Google Docs para pasar piola. ¿Por qué? Porque:
¿Cómo lo hacen?
Crean un documento compartido, abren una tabla o simplemente escriben con colores distintos y chatean en tiempo real, borran, reescriben, comentan, ocultan texto en blanco, usan la función de “comentario” como si fuera WhatsApp… Todo en un doc que se actualiza en vivo.
Algunos lo usan para:
Y aunque parezca una tontera, esto es cultura digital en su máxima expresión: reinterpretar herramientas serias para usos sociales, creativos o rebeldes. Es lo que siempre ha pasado con la tecnología cuando cae en manos de usuarios jóvenes: la reinvención empieza donde termina el manual.
¿Debemos escandalizarnos? Para nada. Más bien entender que las herramientas no son estáticas. Lo que para uno es una planilla de texto, para otro es una red social oculta. Y eso no solo habla de inteligencia digital, sino también de una nueva forma de entender la colaboración.
Así que ya sabes: la próxima vez que veas a alguien escribiendo muy concentrado en un Google Doc… no asumas que está haciendo la tarea. Tal vez está chateando, planificando algo, o simplemente entrenando su creatividad. Y eso, en esta época, también es aprendizaje.
Mario Saavedra, conocido como @MacGenio, es especialista en temas de tecnología y cultura digital.
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