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Un potro de una semana de edad no puede dormir si no es con oso de peluche.
Como una madre sustituta tomó este ejemplar de cuatro patas a un oso de peluche gigante, puesto que es un pony huérfano que se perdió de su madre en Estados Unidos a las pocas horas de haber nacido.
Al momento de ser rescatado el animal estaba a punto de caer en una deshidratación que pudo haber sido fatal, ya que también se encontraba en un fuerte estado de shock.
Este singular lazo de cariño está dentro de lo más visto en la red.
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