La institución presentó un cargo leve y uno grave por el uso indebido de la laguna de regulación del Sistema de Tratamiento de Efluentes y la aplicación de un producto químico sin testeo previo, lo que generó olores molestos en la zona.
La Superintendencia de Medio Ambiente (SMA) inició un procedimiento sancionatorio con la formulación de dos cargos en contra de CMPC Pulp SpA por incumplimientos en la Planta de Celulosa Santa Fe, ubicada en Nacimiento (Región del Biobío).
El proyecto es una planta de celulosa para la producción de papel, en un terreno de aproximadamente 120 hectáreas y que tiene dos líneas de producción de celulosa, una planta de tratamiento secundario de efluentes, un área común para la disposición de residuos industriales sólidos y sistemas de apoyo compartidos.
También cuenta con un Sistema de Tratamiento de Efluentes (STE) para depurar agua antes de su descarga al río Biobío, y una laguna de regulación de 32 mil metros cúbicos destinada a contingencias operativas.
La situación surgió luego de dos denuncias por la emisión de olores a descomposición de materia orgánica provenientes de la plata Santa Fe durante su paralización anual en noviembre de 2022, lo que habría afectado la salud e integridad de varios vecinos del sector.
Tras ello, residentes presentaron un recurso de protección que fue acogido por la Corte Suprema en agosto de 2024. Con ello, se ordenó a la SMA resolver los procedimientos en curso respecto de la empresa.
En detalle, la SMA realizó inspecciones en terreno y requirió información a la CMPC, y constató que la empresa desvió residuos industriales líquidos (RILes) crudos hacia la laguna de regulación del Sistema de Tratamiento de Efluentes durante trabajos de mantenimiento que se llevaron a cabo en las detenciones anuales de producción.
Dichos residuos estuvieron almacenados en la laguna por 15 días en noviembre de 2022.
La práctica, además, se repitió en 2023 y 2024 y no fue autorizada en la Resolución de Calificación Ambiental (RCA) del proyecto. Esto, debido a que el permiso indica que la laguna de regulación está destinada solo a casos de anomalías asociadas al tratamiento de efluentes y su uso inadecuado implica una reducción de la capadidad operativa de la instalación y un aumento en el riesgo de emisión de gases y olores molestos.
A ello se suma que la SMA dio cuenta que el titular de la empresa aplicó un producto químico -Biologic SR2- en la laguna de regulación sin haber realizado pruebas previas en el RIL crudo almacenado durante la detención de la planta en noviembre de 2022.
Esto implicó el incumplimiento de las recomendaciones del proveedor para el uso del producto y sus protocolos internos, lo que terminó provocando la emisión de olores molestos y elevó el riesgo de generar efectos adversos no controlados.
De ese modo, la SMA formuló un cargo leve, por el uso inadecuado de la laguna; y un cargo grave, por incumplimiento de las medidas previstas para la descarga de productos químicos en las instalaciones de la planta.
La Ley Orgánica de la SMA indica que por las infracciones graves, un titular puede ser multado con hasta 5.000 UTA, además de la revocación de la RCA o clausura. Las infracciones de carácter leve consideran una multa de hasta 1.000 UTA.
En este caso, la CMPC se expone a una multa de hasta 6.000 UTA, es decir, más de $4.900 millones.
La empresa tendrá un plazo de 15 días hábiles, desde su notificación, para presentar un Programa de Cumplimiento, y 22 días hábiles para formular sus descargos.
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