Rodrigo Silva, uno de los imputados por su presunta participación en el tráfico de ketamina, compartió una carta desde la cárcel, en la que se declara afectado emocionalmente por la situación, pero también esperanzado de que se esclarecerán los hechos.
Uno de los cinco exfuncionarios de la Fuerza Aérea de Chile (FACh) que se encuentra en prisión preventiva por presunto tráfico de drogas, envió una emotiva carta a sus excompañeros agradeciendo el apoyo recibido desde que fue detenido el pasado 15 de julio.
Rodrigo Silva, uno de los imputados por su presunta participación en el tráfico de ketamina, compartió el mensaje desde la cárcel, en el cual se declara afectado emocionalmente por la situación, pero también esperanzado de que se esclarecerán los hechos.
“Hace rato que no lloraba tanto, pero era de emoción y felicidad, saber que tengo tanta gente que me apoya en esta situación que uno nunca espera vivir”, escribió Silva en la misiva, publicada este lunes por Meganoticias.
¿Qué decía la carta?
En el texto, el exfuncionario no solo expresa gratitud por el respaldo recibido, sino que también explica su versión de lo ocurrido, señalando que está pagando por los errores de otros.
“Estoy pagando por unos wns que abusaron de mi confianza, tanto de mí como de Rebolledo (María Fernanda), que por desgracia está en las mismas que yo”, afirmó.
Silva asegura tener “sentimientos encontrados” y confiesa haber pasado de la pena a la rabia. Sin embargo, mantiene la esperanza: “Con el tiempo se sabrá lo que pasó y los culpables pagarán como corresponde”.
El exmiembro de la FACh también dedica palabras especiales a sus “cursete” —como llama a sus compañeros de curso— y a quienes conoció en una comisión en Manquehue.
“Esa palabra ‘camarada’, esa familia que uno escoge, no tiene precio. Me emocioné mucho. Esos lazos no se pueden romper”, escribió.
La carta finaliza con un mensaje de afecto y gratitud: “Les mando todo mi cariño y agradecimiento. Es muy difícil este momento, pero como nos decían en la escuela: ‘todo pasa’”.
El polémico caso
Silva y los otros cuatro exfuncionarios están bajo prisión preventiva por orden del Juzgado de Garantía de Iquique, tras ser imputados por tráfico de drogas.
Según la investigación, habrían aprovechado su posición dentro de la institución para facilitar el ingreso o distribución de sustancias ilícitas.
Por ahora, la investigación continúa bajo reserva, mientras las defensas buscan esclarecer el grado de participación de cada uno de los involucrados.