Kevin Garrido, joven condenado por el caso Bombas que murió en el penal Santiago 1, habría solicitado resguardos para su seguridad, pues tendría problemas con otros internos.
El joven falleció luego de recibir una serie de ataques con un arma blanca en el tórax y el abdomen, por otro de los reos. Si bien fue trasladado al Hospital Barros Luco, murió antes de llegar al lugar.
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Kevin se encontraba desde 2015 privado de libertad por la colocación de artefacto explosivo, posesión y tenencia de explosivos y porte ilegal de arma punzante. La condena llegó en septiembre de este año, cuando se sentenció que debía cumplir 17 años de prisión.
La abogada de Garrido, Alicia Parra, aseguró que ya se había presentado un recurso de nulidad contra dicho fallo condenatorio, pues “las pruebas con las que había sido condenado no eran suficientes” a criterio de ellos, consigna Bíobiochile.
A esta medida, se suma la de resguardo de la seguridad de Garrido, por problemas que tenía con otros internos. “De esas circunstancias nosotros pusimos en conocimiento al tribunal en distintas ocasiones”, aseguró la abogada.
En septiembre y octubre también pidió audiencias de cautela de garantía para que Gendarmería estuviera al tanto de la situación de Garrido y tomara medidas de resguardo.
El recurso de nulidad que presentó Alicia Parra sigue pendiente, pues se alegó el 29 de octubre pasado, y la lectura había sido fijada para el lunes 19 de noviembre.
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