La misión, liderada por el Ministerio de Defensa y el Estado Mayor Conjunto, busca ampliar la red de proveedores internacionales y fortalecer la capacidad industrial local, con foco en soberanía tecnológica y diversificación estratégica.
Con el objetivo de ampliar su red de proveedores en materia de defensa, una delegación chilena encabezada por representantes del Ministerio de Defensa y el Estado Mayor Conjunto (EMCO) viajó a Estambul, Turquía, para participar en la feria internacional IDEF 2025, una de las principales vitrinas globales de tecnología y equipamiento militar.
Durante dos días, la comitiva sostuvo reuniones con representantes de 15 compañías provenientes de países como Turquía, Alemania, Canadá y Emiratos Árabes Unidos, con el fin de explorar nuevas opciones de adquisición de sistemas de defensa terrestre, aéreo, naval y cibernético, recogió esta jornada La Tercera.
La misión, encomendada por la ministra de Defensa, Adriana Delpiano, incluyó al general de brigada aérea Eduardo Cuadra y al capitán de navío Francisco Romero, ambos del EMCO, así como a Nicolás Muñoz, secretario ejecutivo del Comité Asesor para la Supervisión de Empresas Estratégicas de la Defensa.
Este despliegue internacional responde a una directriz presidencial. En su última Cuenta Pública, el Presidente Gabriel Boric pidió a la ministra Delpiano elaborar un plan para reducir la dependencia de Chile respecto a la industria militar israelí, en medio de duras críticas por la ofensiva del gobierno de ese país en la Franja de Gaza.
“La diversificación de nuestros vínculos en defensa es una política de Estado”, ha reiterado Delpiano, quien, en conversación con el medio ya mencionado, sostuvo que Chile ya cuenta con relaciones amplias en este ámbito, que incluyen a países como Estados Unidos, Francia, Reino Unido, Japón y Canadá.
Entre los países con los que se establecieron vínculos, Turquía destaca como un referente para el Ministerio de Defensa.
En la última década, la nación euroasiática ha logrado aumentar de manera significativa su capacidad de producción militar local, lo que le ha permitido exportar equipamiento y tecnología a diversos países de la OTAN y más allá.
Fuentes del sector aseguran que las compañías con las que Chile entabló contacto cumplen con los estándares técnicos de la Alianza Atlántica, lo que permitiría compatibilidad con los sistemas ya en uso por las Fuerzas Armadas nacionales.
No obstante, también se están evaluando propuestas externas a ese marco, siempre que cumplan con criterios de eficiencia y seguridad operativa.
Además de diversificar proveedores, el Gobierno busca potenciar la industria local de defensa.
La ministra Delpiano explicó que Chile aspira a desarrollar mayores capacidades propias en los sectores naval, militar y aeronáutico, con el doble objetivo de mejorar el autoabastecimiento y fomentar la innovación nacional.
“Este es un esfuerzo permanente que llevamos hace muchos años. No se trata de una reacción puntual, sino de una estrategia de largo plazo para asegurar nuestra soberanía tecnológica y fortalecer el desarrollo económico”, sostuvo la titular de Defensa.
Merco -monitor de reputación empresarial de referencia en Iberoamérica- elaboró su ranking para Chile sobre la base de 61 mil encuestas a diferentes grupos de interés a nivel nacional y un análisis de 200 indicadores de gestión de las diversas compañías.
