Cuando tenía 19 años, Hoda Muthana viajó desde Alabama, en Estados Unidos, a Siria para unirse a ISIS. De acuerdo al Programa de Extremismo de la George Washington University, desde allá tuiteó varias veces llamando a la violencia, especialmente contra los militares estadounidenses.

Cinco años y tres maridos después, la mujer de ahora 24 años dice estar arrepentida de lo que hizo y suplica que la dejen regresar a Estados Unidos. “Cuando me fui a Siria era una joven ingenua, enojada y arrogante. Creía que entendía mis creencias religiosas”, escribió en una carta escrita a mano a la que tuvo acceso CNN.

Allá fue testigo de las trágicas consecuencias de la guerra, e incluso vio a dos de sus esposos morir. “Ver a amigos, niños y los hombres con quienes me casé, morir, me cambió (…) Ver lo diferente que puede ser una sociedad comparada con la amada América en la que nací y me crié, me ha cambiado”, escribió.

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Desde un campo de refugiados en Siria, en donde se encuentra junto su hijo de 18 meses y otras personas que huyeron del Estado Islámico, ahora pide perdón y el permiso para regresar.

Negativa del gobierno

Pese a su mediático arrepentimiento, el presidente Donald Trump anunció este miércoles que Muthana no podrá volver a EE.UU.

“He dado instrucciones al secretario de Estado Mike Pompeo, y él está totalmente de acuerdo en no permitir que Hoda Muthana regrese al país!“, comunicó el mandatario.

Pompeo afirmó que la razón por la cual la joven no podrá volver es porque no es una ciudadana estadounidense, algo que fue cuestionado por su abogado, Hassan Shibly. Según él, el secretario de Estado se basa en una interpretación “complicada” de la ley de inmigración.

De hecho, Shibly publicó en Twitter una copia del certificado de nacimiento de Muthana, el que indica que nació en Hackensack, New Jersey, en octubre de 1994,  meses después de que su padre informara al gobierno estadounidense que ya no era diplomático.

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