Tras tres semanas de protestas, el gobierno de Panamá, liderado por el presidente Laurentino Cortizo, anunció que regulará el precio de 72 alimentos.
La ciudadanía inició las manifestaciones luego de una serie de incrementos en los precios, bloqueando carreteras e impidiendo que camiones de carga entregaran alimentos.
El Índice de Precios al Consumidor (IPC) de junio registró una variación interanual de 5,2%, rebasando la registrada durante 2021, de 2,6%.
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La Iglesia Católica actuó como ente mediador mientras el Gobierno impulsaba un acuerdo con los gremios. Posteriormente, a través de un comunicado, la presidencia comunicó: “Con la regulación de los 72 productos, la disminución en el costo de la canasta básica de alimentos sería del 30% y el ahorro de más de 80 dólares”.
En el caso de la gasolina y el diésel, la administración de Cortizo primero fijó el precio en 3,95 dólares por galón y luego lo bajó a 3,25 dólares, en un intento fallido por detener las manifestaciones realizadas en todo el país.
Aún así, la ciudadanía no quedó conforme y están pidiendo restricciones en el gasto público, mayor transparencia y más inversiones en salud y educación.
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