Mansuy: “Las derechas se juegan buena parte de su destino en el modo en que reaccionen a los resultados del 16 de noviembre”

Por CNN Chile

03.11.2025 / 23:43

El panelista de Tolerancia Cero advierte que la primera vuelta presidencial se perfila como una inusual primaria entre las derechas, marcadas por la negativa de José Antonio Kast a participar en una contienda unitaria. Aunque la estrategia podría maximizar el voto del sector, Mansuy subraya los riesgos de una fragmentación difícil de recomponer de cara a la segunda vuelta y a un eventual gobierno.


Se avecina la primera vuelta que será sobre todo esta vez curiosamente una primaria entre las derechas.

Esta estrategia forzada por la negativa de José Antonio Casas a participar en la primaria legal, tiene una ventaja. En principio permite maximizar los votos.

De hecho, la derecha, o las derechas más bien, están en la inédita situación de tener tres candidatos a presidencia significativos, que podrían llegar en segundo, tercer y cuarto lugar y sumar entre ellos, algo así como un 60% de los votos.

Pero la estrategia también tiene un defecto, divide fuerzas que no es tan fácil recomponer luego, tanto de cara a la segunda vuelta como de cara al eventual futuro gobierno.

De hecho, en el escenario improbable, pero no imposible, que el triple empate entre las tres candidaturas de derecha se haga la paradoja siguiente: tres candidatos que suman algo así como un 60%, pero una distancia de por lo menos 10 o más puntos, juntos con la candidata que haya llegado en primer lugar, que seguramente será la candidata Jeannette Jara, lo que abre una nueva elección en la segunda vuelta.

Es sabido, todos sabemos que administrar la bonanza puede ser mucho más difícil que administrar la escasez. Pues bien, tal es exactamente el desafío que enfrentan las derechas chilenas; no dilapidar un buen resultado y proyectar lo más importante que es darle gobernabilidad a país a partir del 11 de marzo.

Quedan menos de dos semanas para la elección, es normal que la temperatura suba a medida que sube la tensión y la presión, hay mucho en juego, nadie quiere dar espacio, sobre todo nadie quiere llegar cuarto o quinto eventualmente.

Con todo y más allá del nombre del ganador de esa noche, las derechas se juegan buena parte de su destino en el modo en que reaccionen a los resultados del 16 de noviembre.

De hecho, esa misma noche, según las palabras que pronuncie cada cual, podremos saber qué significa esta extraña guerrilla entre las tres derechas.