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Todo era euforia en el segundo gol de Croacia. Y cómo no, si tuvieron que batallar 109 minutos para marcar el tan ansiado tanto que los pusiera en ventaja y los llevara a la final.
Y en ese momento ocurrió una escena que quedará para la anécdota. En el festejo tras la anotación de Mandzukic, un reportero gráfico quedó atrapado en la avalancha de jugadores que arremetió en el borde de la cancha para celebrar.
El fotógrafo terminó en el suelo, al igual que los futbolistas. La alegría era tal que los jugadores incluso lo abrazaron, y él aprovechó todo el momento para sacar fotos desde un ángulo irrepetible.
Así fue como comenzó todo:
Después, fueron los mismos seleccionados croatas quienes lo ayudaron a levantarse. Hasta besos recibió.
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