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Tras un intenso trabajo junto a un grupo de científicos de la Clínica Mayo (Minesota) y la Universidad de California en Los Ángeles, un hombre de 29 años volvió a caminar en Estados Unidos.

Según revela la revista Nature Medicine, todo fue posible gracias al implante de un electrodo y con la ayuda de un andador.

El hombre había quedado paraplégico, luego de sufrir un accidente de motonieve. Con el tratamiento, pudo recorrer el equivalente de la longitud de un campo de fútbol luego de un año de ejercicios bajo estimulación eléctrica.

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El uso de un solo programa de electrodos activos y parámetros de estimulación (voltaje, ancho de pulso y frecuencia) permitió al sujeto controlar la función en una pierna a una intensidad de voltaje que era subóptima para permitir la función en la pierna contralateral”, indica el estudio.

El artículo detalla que en la semana 43, el joven pudo mejorar su capacidad de controlar cada pierna.

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Mantuvo el equilibrio de la parte superior del cuerpo colocando las manos en las barras de soporte (de la cinta para caminar) para facilitar el desplazamiento del peso anterolateral durante la marcha”, señala la publicación.

Según informan desde la clínica, el joven asistió a 113 sesiones de rehabilitación durante un año, en las cuales con ayuda de un andador con ruedas delanteras y asistencia logró finalmente recorrer cerca de 102 metros.

El neurocirujano y uno de los integrantes de la investigación, Keldall Lee, señala que este caso “lo que nos está enseñando es que esas redes de neuronas debajo de una lesión de médula espinal, todavía pueden funcionar tras una parálisis“.

A través de las sesiones se pudo comprobar que el hombre podía caminar con ayuda de un andador con ruedas delanteras, además de pisar la cinta de la caminadora apoyando sus manos en las barras de soporte del aparato para equilibrarse. 25 semanas después del trasplante, se logró que el sujeto dejara de usar arnés para sostenerse y que fuera ayudado por entrenadores solo de forma ocasional.

Al final del estudio pudo aprender a reorganizar su propio peso para mantener el equilibrio e impulsarse hacia adelante.

Es la primera vez que se puede poner en práctica en un hombre con la parte inferior del cuerpo totalmente paralizada un proceso de desplazamiento en cinta rodante o con andador”, explicó a la AFP la doctora Kristin Zhao, quien agrega que se continuará la investigación con otras personas “para entender mejor a quién puede beneficiar este tipo de intervención”, agregó la doctora

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