Los destacados astrónomos y Premios Nacionales de Ciencias, José Maza y María Teresa Ruiz, entregaron su postura sobre la instalación de un reactor nuclear en la Luna, impulsada por la NASA.
(CNN/CNN Chile) — El administrador interino de la NASA, Sean Duffy, ha ordenado a la agencia acelerar los planes para colocar un reactor nuclear en la Luna.
Acelerar el trabajo para colocar un reactor en la superficie lunar que colabore con la campaña de exploración mantendría a Estados Unidos por delante de China y Rusia, países que han “anunciado en al menos tres ocasiones” un intento conjunto para desarrollar un proyecto similar para mediados de la década de 2030, según una directiva fechada el 31 de julio y obtenida por CNN.
Si otro país logra este hito primero, podría declarar una “zona de exclusión” que, en la práctica, impediría a EE.UU. alcanzar su objetivo de establecer una presencia en la superficie lunar a través del programa Artemis de la NASA. Se espera que la misión Artemis III de la agencia, actualmente prevista para 2027, vuelva a enviar humanos a la superficie lunar por primera vez en más de cinco décadas. Pero el programa aún debe superar varios osbtáculos para alcanzar ese objetivo.
“Estamos en una carrera por la Luna, en una carrera con China por la Luna”, dijo Duffy a los periodistas en una conferencia de prensa sobre drones este martes. “Y para tener una base lunar, necesitamos energía”.

Sean Duffy interroga al presidente de la Reserva Federal, en Washington, D.C., el 18 de julio de 2018. Crédito: Mary F. Calvert/Reuters. Mary F. Calvert/Reuters.
“Ma parece que es algo inmoral”
Estos anuncios han generado preocupación en el mundo científico nacional. La Premio Nacional de Ciencias y profesora emérita de la Universidad de Chile, María Teresa Ruiz, comentó que “es posible técnicamente ir a instalar un reactor nuclear. Puede que sea caro, puede que sea trivial, pero yo creo que sí, se puede; el tema es si se debe”.
Desde su perspectiva, se podría explorar alguna de las energías limpias que se han desarrollado en la Tierra, comenzando por la energía solar y otras que puedan funcionar en la Luna. Sin embargo, advirtió: “El proponer siquiera ir a contaminar o llevar algo que pudiera ser contaminante a la superficie de la Luna me parece una barbaridad”.
En esa línea, cuestionó que se pasen por alto los tratados nacionales, binacionales o multinacionales, “donde parece ser que cualquier cosa vale”, y subrayó: “Me parece que es algo inmoral”.
Por su parte, el Premio Nacional de Ciencias Exactas 1999, astrónomo y profesor emérito de la Universidad de Chile, José Maza, complementó que lo que se pretende realizar es “difícil y bastante peligroso” y agregó: “El reactor nuclear lo van a armar ciertamente en la Tierra y lo van a llevar, pero lo tienen que dejar caer en el fondo, lo tienen que posar en la superficie lunar, y eso es una maniobra que no es trivial. Muchas naves han fracasado al tratar de posarse suavemente en la Luna”.
Concluyó: “Sería una catástrofe que el reactor nuclear se rompiera porque cayó violentamente sobre la superficie lunar. Así que es peligroso. Yo lo encuentro peligroso”.