Caso Colún: Nacionalistas explican que sabotaje a Soprole no es contra inmigrantes, sino contra tráfico de personas

Una campaña viral en favor de Colún emergió en redes sociales el pasado jueves. Sin embargo, lejos de ser orgánica, la iniciativa partió del Movimiento Social Patriota, grupo nacionalista responsable de manifestaciones contra el aborto, el feminismo y la comunidad LGTB. 

¿Qué pasó?

La información que se difundió velozmente en Internet habla contra Soprole, Nestlé y Watt’s, multinacionales que enfrentaron una denuncia ante la Fiscalía Nacional Económica (FNE) en 2017 por una presunta colusión que terminaría impactando a Colún. El organismo, eso sí, concluyó en enero de este año que no hubo infracción de dichas empresas.

Las marcas, acusan en redes sociales, habrían estado presuntamente bloqueando la publicidad de Colún, pero no sólo eso: el MSP llamó literalmente a boicotear a Soprole “por ser antinacional, por promover el descontrol migratorio, por vender leche reconstituida, por dañar a los productores chilenos”.

Nacionalismo ahora !! Basta de abusos, basta de pasar por encima de nuestra gente, tradiciones e Historia! Es hora de salvar a nuestro amado Chile ! Que les duela el bolsillo a los traidores ! pic.twitter.com/ESz7DbXmwI

— Mov. Social Patriota (@movs_patriota) August 12, 2018

¿Qué dijo Colún?

En declaraciones que recoge La Tercera, el presidente de la cooperativa lechera de La Unión, Augusto Grob, se desmarcó de la iniciativa que impulsó el grupo nacionalista.

“Creo que no corresponde ese tipo de campañas, porque hay maneras y maneras de conquistar su público y nosotros apostamos a la calidad y a nada más que a eso. En eso hemos estado concentrados”, explicó.

Social Patriotas insisten en el boicot

En declaraciones al mismo medio, el vocero del MSP, Pedro Kunstmann, explicó que la acción “tiene que ver con una cuestión sentimental prácticamente con aquellas personas que se sienten chilenos y quieren preferir lo propio”.

E insisten en sus dardos contra Soprole por un spot de la marca en el que aparece una niña inmigrante bailando cueca. Acusan a la empresa de intentar una “especie de reingeniería social a partir del video”.

“Ojo, el movimiento no ha estado nunca en contra de los inmigrantes, está en contra del tráfico de las personas, la esclavización que se produce de las mismas y la precarización que se produce de los chilenos”, explicó.