Una de las imágenes que llamó la atención dentro de la masiva marcha del Día Internacional de la Mujer, el pasado viernes 8 de marzo, fue la del papá de Silvana Garrido -la joven que murió en enero al caer del piso 23 de su departamento después de una discusión con su pareja-, quien usaba una polera en que la homenajeaba.

Hoy salgo a gritar YO, porque mi hija ya no puede hacerlo”, decía. Si bien en un inicio se consignó que se trató de un suicidio, los cercanos a la joven rechazan esa versión y atribuyen la responsabilidad a Fernando Flores, el padre de su hija y con quien tenía una relación hace siete años.

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Desde su entorno acusan que Flores era celópata y violento, que no la dejaba trabajar, y que la joven estaba preparándose para alejarse de él y rehacer su vida junto a su hija. En conversación con “Sigamos de largo” de Canal 13, Raúl Garrido, se refirió por primera vez a la situación y explicó que Silvana nunca les comentó lo que enfrentaba.

“Ella nunca nos quiso preocupar a nosotros, quería salir adelante sola. Nosotros sabíamos algunas cosas pero nunca pensamos que era para tanto”, relató, y explicó que ella sostenía una relación cercana con la familia, que los llamaba durante las mañanas el fin de semana, y que “siempre decía que estaba todo bien”.

Sus amigas nos contaron que él siempre la maltrataba, le pegaba, la tiraba para abajo porque ella tenía muchos proyectos. Tenía plata en el banco y quería irse, él no soportó eso”, agregó.

Del mismo modo, confirmó que cree que fue su pareja quien la lanzó desde el balcón, y criticó el actuar de la policía: “Los vecinos dicen que habían muchos gritos, que me hija pedía ayuda. Los vecinos llamaron a los carabineros, que nunca se presentaron, nunca hicieron nada”, dijo.

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Por otra parte explicó que su decisión de asistir a la marcha del 8M fue para “gritar por Silvana” y que su muerte cambió a toda la familia, debido a que además se han hecho cargo de su hija de 3 años. “Tenemos que luchar por nuestra nieta“, señaló.

Raúl además afirmó que cree que las mujeres no están denunciando las violencias que enfrentan, “y si lo hacen, les dan orden de alejamiento pero eso no existe, no sirve. Hay muy poca protección para las mujeres, eso no funciona“.

“Carabineros debería pasar todas las noches para preguntarle a los conserjes como están ellas, esa debería ser su misión“, cerró.

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