La empresa advirtió que la situación ha tenido repercusiones en el suministro de electricidad. Durante el primer semestre, 445.414 clientes sufrieron cortes de luz debido al robo de cables, el cual afecta las redes de distribución y transmisión eléctrica.
La Compañía General de Electricidad (CGE) reportó que ha habido 705 casos de robo de cables durante el primer semestre de 2025.
De acuerdo a la empresa, que opera desde Arica y Parinacota hasta La Araucanía, este tip de delito se ha multiplicado por cuatro en comparación al mismo período de 2024, cuando los episodios llegaron a 190.
Respecto a la cantidad de cable de cobre sustraído, esta alcanza los 209 kilómetros (209.112 metros), es decir, equivale a la distancia entre Santiago y Molina (Región del Maule).
Daniel Fredes, subdirector de Operaciones de CGE, comentó que para la misma fecha del año pasado, el cable robado llegó a 58 kilómetros, “lo que implica que estamos viendo un incremento de casi un 300% en los robos. Esta situación muestra que esto se ha transformado en un delito de alto impacto público y con consecuencias muy complejas en el ámbito del suministro eléctrico”.
En lo que va del año, las regiones más afectadas fueron las de Coquimbo (59.198 metros), Biobío (27.223 metros), Maule (22.317 metros), Antofagasta (22.127 metros), Tarapacá (21.185 metros) y Metropolitana (20.420 metros).
CGE reporta más de 700 casos de robo de cables en el primer semestre/CGE
El ilícito, además, ha tenido repercusiones en el suministro de electricidad.
Según la CGE, durante el primer semestre 445.414 clientes sufrieron cortes de luz debido al robo de cables, el cual afecta las redes de distribución y transmisión eléctrica.
A ello se suma el costo de reparación de la infraestructura dañada o destruida y la reposición del material robado, que superó los $4 millones en lo que va del año.
“La acción de estas bandas, que cuentan con material y personal técnico especializado, es una clara señal de su asociación al crimen organizado”, advirtió Fredes.
Y añadió que estas organizaciones tienen un modus operandi desarrollado y que se movilizan entre regiones, “buscando donde pueden cometer estos delitos y causar el mayor daño. El perjuicio que provocan estas bandas delictuales no es solo a la infraestructura, sino también a la calidad y continuidad del servicio eléctrico para miles de clientes a lo largo de la zona de concesión de CGE”.
Metros de cable robado por cada región/CGE
Merco -monitor de reputación empresarial de referencia en Iberoamérica- elaboró su ranking para Chile sobre la base de 61 mil encuestas a diferentes grupos de interés a nivel nacional y un análisis de 200 indicadores de gestión de las diversas compañías.
