Quienes han podido mantenerse en confinamiento ante la pandemia del coronavirus han debido enfrentar cambios en sus rutinas para poder sobrellevar el encierro. En ese sentido, la alimentación resulta un facto clave en una vida saludable.
Manteniéndonos en nuestros hogares es sencillo caer en la tentación de sacar algo del refrigerador. Es por ello que es fundamental adoptar disciplina respecto a las comidas diarias.
Con mayor ansiedad, es posible que nuestros gustos apelen a lo dulce o alto en grasas. Para evitar caer en antojos, los expertos recomiendan fijar horarios y seguir una rutina.
Esto no implica limitarse a comer cuatro veces al día. Entre desayuno, almuerzo y once o cena puede incluirse una colación, sobre todo en el caso de las niñas y niños.
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“En esta época de cuarentena es muy importante cuidarse y alimentarse lo más sano posible. “Si quieres cocinar en tu casa, perfectamente puedes sacar una receta de Internet o Instagram, y para hacerla saludable, cambiar algunos ingredientes“, dijo la nutricionista Bernardita Vignola.
Pero respecto a nuestra alimentación no todo se refiere al “qué” comemos, sino también a “cómo” lo hacemos. El médico nutriólogo Jaime García explicó que este momento entrega la posibilidad “de reecontrarnos con una alimentación saludable y aprender sobre ella”.
El poder saborear los alimentos tampoco es algo que debamos pasar por alto. Por eso es clave disfrutar de un plato de comida durante un largo periodo de tiempo. “Si uno come rápido lo más probable es que tu cerebro no se dio cuenta de que comiste, y después te va pidiendo y se producen los picoteos”, añadió el médico.
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