A menos de dos semanas del plebiscito de salida que definirá el rumbo constitucional del país, en la derecha pareciera no haber acuerdo respecto al mecanismo para iniciar un nuevo proceso constituyente si se impone el Rechazo, o si debiera haber un nuevo proceso.
Definiciones que complican al sector, que ha tenido que vivir con dos visiones respecto de qué hacer luego del plebiscito.
Por un lado, desde Chile Vamos transmiten que es necesario llegar a un acuerdo amplio por una nueva Constitución si gana el Rechazo, mientras que el Partido Republicano ve con distancia un nuevo proceso constituyente y exigen que este se someta a una nueva consulta ciudadana.
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“Creo que el Partido Republicano y Chile Vamos son proyectos políticos distintos y cada uno tendrá que ver como apoya el progreso de Chile. Ahora, una Convención fracasada no es algo que en lo personal me atraiga”, sostuvo el senador Rojo Edwards.
Por otro lado, el diputado Diego Schalper (RN) explicó que “una cosa es lo que sucede desde aquí al 4 de septiembre, donde hemos coincidido en una mirada de Rechazo transversal (…) y cada coalición tendrá que hacer su reflexión desde el 5 de septiembre, yo no me adelantaría”.
“Espero que las personas que se quieren excluir de este proceso se den cuenta de la importancia que tiene para Chile habilitarle una nueva oportunidad a la Constitución”, afirmó el presidente de la UDI, Javier Macaya.
En esa línea, el timonel gremialista agregó que están convencidos de que tras el plebiscito “vamos a tener que convocar a un gran acuerdo de construcción de una nueva carta fundamental”.
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“No sé si vamos a ser parte del acuerdo, pero no nos vamos a restar de ninguna instancia en donde como bancada y partido trabajemos con las personas”, señaló la vicepresidenta de los republicanos, Ruth Hurtado.
Aún cuando se logre configurar un acuerdo con o sin republicanos, iniciar un nuevo proceso para la redacción de otra propuesta constitucional requeriría del voto favorable de 4/7 del Congreso.
Por ello, Jorge Guzmán, vicepresidente de Evópoli, instó a los republicanos “a que se sumen a la idea de un nuevo proceso constituyente”, pero advirtió que si no lo hacen “con los votos de Chile Vamos junto a la izquierda democrática” basta para tener la reforma.
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