Un total de 2,5 millones de canastas de alimentos para familias vulnerables fueron anunciadas por el presidente Sebastián Piñera para poder realizar las medidas de confinamiento, al mismo tiempo que en El Bosque ocurrían protestas por la misma causa.
En conversación con CNN Chile, Eve Crowley, representante en Chile de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), señaló que para la composición de los insumos se debe considerar tanto garantizar una alimentación adecuada como la duración de los productos.
“En una canasta uno también tiene que pensar cómo asegurar la logística, cómo otorgar esto a millones de personas, entonces el tema de la perecibilidad es un tema no menor“, detalló.
De este modo detalló que “en momentos de crisis humanitarias agudos es muy común usar una canasta alimentaria con concentraciones de carbohidratos, aceites y legumbres como una de las herramientas“.
“Legumbres es el componente más saludable, el resto funciona para entregar calorías pero no necesariamente es una dieta equilibrada. En muchos otros países lo que recomiendan como complementario a esto es un tipo de ticket o una tarjeta que permite acceder a alimentos más frescos que son perecibles”, añadió.
De este modo, Crowley aseguró que “en esta caja yo creo que no es posible garantizar una alimentación completamente saludable, se aseguran al menos las calorías para vivir y ayuda en advertir una crisis alimentaria severa”.
“Es una medida de asistencia humanitaria que puede ser en momentos de crisis, no es una dieta para el largo plazo“, cerró.
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