El episodio incluyó la difusión de una caricatura suya, generada con inteligencia artificial, que fue compartida por WhatsApp y mostrada públicamente por un jefe policial frente a otros comisarios y oficiales de la PDI.
Un mayor de Carabineros presentó esta semana una denuncia por acoso laboral bajo la Ley Karin, luego de ser blanco de burlas por parte de sus colegas durante una reunión institucional.
El hecho, ocurrido en la Región de Coquimbo, involucra a altos mandos de la institución policial y ha generado cuestionamientos sobre el manejo interno de situaciones de maltrato y discriminación.
El mayor Felipe Barraza, quien hasta abril se desempeñaba como comisario en la comuna de Vicuña, relató, en conversación con T13, que la situación se produjo mientras tramitaba los permisos necesarios para realizar su práctica profesional en la Corporación de Asistencia Judicial, tras haberse licenciado en Derecho.
Sin embargo, en medio de una reunión con otros comisarios y jefes de la PDI regional, fue víctima de una serie de comentarios ofensivos por su sobrepeso.
“Me dijeron que, como no había chaquetas de mi talla, podía usar el mantel de la mesa para confeccionar una”, contó Barraza en su denuncia.
Pero el momento más incómodo llegó cuando uno de sus colegas generó una caricatura suya utilizando Inteligencia Artificial y la difundió en grupos de WhatsApp.
La imagen incluso fue mostrada por el propio jefe policial de la zona a los demás asistentes, lo que desató risas en la sala.
“Yo me encontraba en una situación de poder desigual. No tuve más opción que quedarme en la mesa”, explicó Barraza, visiblemente afectado.
Tras el incidente, el mayor acudió al médico y recibió una licencia por diez días, que luego fue extendida por un mes por un psiquiatra.
Pese a su estado emocional, el profesional de salud le recomendó continuar con su práctica jurídica, lo que hizo bajo el marco legal correspondiente.
Sin embargo, una denuncia anónima alertó a Carabineros de que estaba realizando esta actividad mientras estaba con licencia.
Barraza insiste en que su práctica no constituye trabajo remunerado y que la ley es clara en ese sentido. “El artículo 8 del Código del Trabajo señala que las prácticas profesionales no generan vínculo laboral. Son parte del proceso educativo”, subrayó.
Barraza presentó formalmente una denuncia por acoso bajo la Ley Karin el pasado 9 de abril. Sin embargo, asegura que, a tres meses del hecho, apenas se le ha tomado una declaración, mientras que un sumario administrativo en su contra avanza rápidamente con miras a una posible desvinculación.
“Ese sumario va más avanzado que mi investigación por acoso laboral. No entiendo por qué se me niega hacer mi práctica, cuando otros oficiales y suboficiales sí lo hacen. ¿Será porque hice esta denuncia contra el jefe de zona?”, se pregunta.
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