A casi dos meses de la realización del plebiscito del próximo 25 de octubre, la comunidad científica, política y legislativa se organiza para idear una votación segura y que evite mayores contagios a causa del coronavirus.
En este sentido, el vocero de la Sociedad Chilena de Medicina Intensiva (Sochimi), Mario Luppi, sostuvo que “ahora que están circulando mucho más masivamente, es muy probable que esta situación vaya creciendo con el paso de los días y que, a fines de este mes o los primeros días de septiembre, tengamos un número mayor de contagiados. Es una posibilidad”.
En conversación con CNN Chile, el infectólogo del Hospital de la Universidad de Chile sostuvo que “si las condiciones en octubre son óptimas, esta situación sigue en disminución, no hay un rebrote y hay una forma segura de ir a votar, creo que la votación debe efectuarse”.
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Por otra parte, el abogado constitucionalista Patricio Zapata indicó que “si la situación se torna muy negativa para la salud de las personas, tendremos que tener la misma posición generosa y prudente que hubo en marzo (postergar el plebiscito)”.
Zapata sugiere que, en caso de aumentar los contagios, tomar las recomendaciones de la comunidad científica y “no dejarnos llevar por la voluntad política que pueda tener. Hay gente que tiene más ganas de que haya un plebiscito y otra gente que no”.
Respecto a esto último, sostuvo que “hay que guardarse las ganas personales. Todos tenemos preferencias, pero tenemos que ser muy serios. Escuchar la evidencia científica, preocuparnos de la salud y, mientras tanto, en vez de especular o asustar, tomar medidas”.
Riesgos de ir a votar
El doctor Mario Luppi dice que votar el próximo 25 de octubre implicaría un “riesgo intermedio” ante posibles contagios a causa del COVID-19. Sin embargo, enfatizó que “lo más importante es la responsabilidad de cada persona en el cumplimiento de las recomendaciones para protegerse”.
“Aquí tenemos dos polos: el que tiene que ofrecer lugar de votación y el que tiene que ofrecer la persona cumpliendo con todas las obligaciones sanitarias. Cuando esas dos cosas se juntan, podemos tener una situación favorable“, afirmó.
En la misma línea, indicó que se deben dar las condiciones para que los votantes se movilicen de forma segura a través del transporte público y también en los locales.
“Llegado al lugar de votación, tienen que cumplirse las mismas medidas que en otros lados: el control de la temperatura, el distanciamiento físico, cada sector debe estar lógicamente señalizado. También qué cantidad de personas habrá dentro donde uno vota, cuántos vocales de mesas, si se compartirá el material o no”, dijo.
Voto remoto
Los expertos también discutieron sobre la idea propuesta por el Colegio Médico sobre el uso de voto electrónico exclusivo para pacientes que les dificulte votar, tales como pacientes con PCR positivo, tercera edad y con enfermedades de base.
“Sería una solución bastante viable, en la medida que tecnológicamente se pudiera hacer y que fuera legalmente factible, porque hay un porcentaje de la población que por más ganas que tenga de ir a votar, tiene altísimo riesgo de ir a espacios públicos en áreas abiertas o cerradas”, dijo Luppi.
Zapata en tanto, sostuvo que si de ser efectivo este tipo de votación, ya se habría informado por parte de las autoridades. “Tengo la impresión de que, si ya no se implementó de esta forma, es bien difícil que lo podamos hacer en términos prácticos y generales”, señaló.
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“Aquí hay chilenos y chilenas que tienen derecho a votar, y van a tener una dificultad objetiva, y yo creo que hace mucho tiempo se tuvieron que implementar fórmulas que no son únicamente el voto por correo o electrónico“, agregó.
En este sentido, recomendó el establecimiento de “horarios preferentes para este grupo de mayor riesgo” y descartar el sufragio para pacientes con COVID-19. “El problema de los PCR positivos es distinto, porque ahí tenemos una medida cautelar, de aislamiento necesario e indispensable. Yo creo que en ese caso, no tiene mucho sentido que esa persona vaya a votar y ejercer su derecho, cuando en ese ejercicio pone en riesgo muy directo a otras personas”, apuntó.
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