Esta jornada se vive en Estados Unidos el denominado “mini súper martes”, en el que hay en juego 352 delegados demócratas. Joe Biden, que se distanció de Bernie Sanders en las primarias de la semana pasada, podría consolidar la diferencia, según las encuestas, especialmente en Michigan, un estado de clase trabajadora en el que en el pasado Sanders venció a Hillary Clinton.
“No creo que existan garantías, así es que no doy nada por hecho hasta que cierren las mesas. Ya veremos. Espero que me vaya bien, pero ya saben, las encuestas se han equivocado antes“, dijo Biden este martes.
Sanders, por su parte, cree que “la clase trabajadora aquí, en Michigan y en nuestro país, entiende que en Joe Biden encuentra un candidato respaldado por Wall Street“.
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Si Sanders no consigue sumar la mayoría de los delegados de Michigan, para algunos sería muestra de que su base de votantes se está debilitando.
Michigan es uno de los “swing states”, es decir, en el que los dos grandes partidos tienen un apoyo similar y se inclina por uno o por otro dependiendo del momento y del candidato, lo que lo convierte en un territorio clave para el resultado a nivel nacional.
La última encuesta de CNN revela que el 66% de los estadounidenses cree que Biden es mejor candidato frente a Trump, mientras sólo un 26% dice que Sanders tiene las mejores opciones de sacar al republicano de la Casa Blanca.
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