Este jueves el movimiento No + Tag manifestó nuevamente su descontento por el alza de 6,4% que tendrán las autopistas urbanas de la Región Metropolitanas a partir del 1 de enero de 2019.
Esta subida de tarifas se debe a una formula incorporada en los contratos con las concesionarias, que considera un factor fijo de 3,5% anual, que se suma al IPC acumulado entre diciembre del año previo y noviembre del año en curso.
Por esto, los conductores tendrán que pagar más cada año por el uso de las autopistas urbanas, de acuerdo a la duración de los contratos con las empresas, los que están definidos como mínimo hasta el 2032, según lo grafica La Tercera.
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Sobre la posibilidad que esta situación pueda cambiarse a favor de los usuarios, el experto en transporte y logística de la Universidad de Santiago, Juan Pedro Sepúlveda, entrega una visión no muy positiva.
“No hay nada que hacer, porque habría que modificar los contratos, y eso es muy complicado, ya que es un contrato entre el Estado y las Concesionarias, por lo que sería cambiar las reglas del juego y sería dañar la imagen de Chile”, asegura al matutino, agregando que hasta la fecha de término de los contratos no hay mucho más que apelar a la “buena voluntad de las empresas” para cambiar las tarifas.
El detalle de las fechas que finalizan los contratos de las empresas, a continuación:
- Vespucio Sur: diciembre de 2032
- Vespucio Norte: abril de 2033
- Autopista Central: julio de 2032
- Autopista Radial Nororiente: noviembre de 2044
- Túnel San Cristóbal: agosto de 2037
- Costanera Norte (nombre oficial Concesión Sistema Oriente – Poniente): junio de 2036
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