Una iniciativa que busca prohibir y sancionar a quienes arrojen filtros o colillas de cigarro en la vía pública fue la presentada este miércoles por la diputada Carolina Marzán (PPD).
“Queremos incentivar que las personas que tienen el mal hábito de fumar y tirar las colillas al suelo, ¡entiendan que el planeta no es cenicero! Basta de contaminación, hay que hacerse cargo de los residuos que deja el cigarro una vez que es botado al suelo”, dijo la parlamentaria en conversación con ADN Radio.
El proyecto incluye tres puntos, que consisten en sancionar a quienes realicen esta práctica, que se implementen contenedores para botar este tipo de desechos, y que los filtros y colillas sean de materiales amigables con el medioambiente.
Con respecto a este último punto, Marzán propone que “los filtros y las colillas de los cigarrillos que se comercialicen dentro del territorio nacional deberán ser fabricados con materiales biodegradables o susceptibles de ser reutilizables, reciclables o compostables“.
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Además, establece que los lugares que no cuenten con patios y espacios al aire libre “deberán instalar en su entrada ceniceros, contenedores o receptáculos destinados al depósito de filtros, colillas y cenizas de cigarrillos, procurando facilitar el reciclaje, reutilización o compostaje de estos residuos”.
La iniciativa fue presentada por la parlamentaria pocos días después de que una ley similar se aprobara en Portugal. La semana pasada el Parlamento portugués aprobó un proyecto de ley que establece multas de entre 25 ($19 mil) y 250 euros ($193 mil) por tirar colillas al suelo y obliga a los establecimientos a colocar ceniceros en el exterior.
Los locales que no sigan la norma y no dispongan de ceniceros podrán recibir multas de entre 250 y 1.500 euros (más de $1 millón).
En la misma jornada en el país se aprobaron además otras iniciativas como prohibir las bolsas de plástico ligeras y los embalajes desechables de poliestireno para frutas, verduras y pan.
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