Las protestas en las calles de Francia se intensifican en la que ya es la mayor crisis política y social desde 2018, año de la revuelta de los chalecos amarillos. La tensión entre el gobierno, sindicatos y manifestantes continúa debido a la reforma de pensiones del presidente Emmanuel Macron.
Se espera que las manifestaciones se mantengan durante estos días. Los sindicatos han anunciado la novena jornada de huelga nacional para este jueves 23 de marzo.
¿Por qué protestan en Francia?
La reforma de pensiones impuesta por decreto del presidente francés, Emmanuel Macron, provocó una creciente tensión social y política, luego de ser aprobada bajo una disposición constitucional —artículo 49.3—, que le da la facultad de saltarse el voto legislativo.
Aquello causó indignación tanto en las calles como en la Asamblea Nacional (Cámara de Diputados), quienes levantaron dos mociones de censura. La reforma las superó por apenas nueve votos, provocando “esperanza” en la oposición y sindicatos.
Algunos de los cambios que realizaría esta reforma son retrasar la edad de jubilación de 62 a 64 para el 2030, y adelantar para 2027 la exigencia de cotizar 43 años (actualmente son 42) para cobrar la pensión completa.
¿Qué han hecho los manifestantes?
Durante enero y febrero se realizaron cinco manifestaciones pacíficas multitudinarias. Sin embargo, el gobierno no las tomó en cuenta y siguió con el trámite de la reforma. Fue ahí que los sindicatos decidieron intensificar sus acciones y bloquearon sectores claves, como la energía y el transporte.
Viajes en tren y vuelos han sido constantemente cancelados por la situación del país.
Las protestas y huelgas han provocado que el gobierno francés interviniera el martes, forzando a los huelguistas a trabajar debido al desabastecimiento de combustibles en el país. Le Figaro indicó que el 9,5% de las gasolineras se quedaron sin gasolina o sin gasóleo, aunque los valores cambian según las regiones.
El portavoz del Gobierno, Olivier Véran, advirtió que se tomarán medidas similares en caso de otros problemas de aprovisionamiento.
¿Qué dice Macron?
El presidente Emmanuel Macron asumió este miércoles toda la impopularidad que puede acarrearle la reforma de las pensiones. En su primera intervención pública tras la adopción el pasado lunes de la reforma, el mandatario dijo que “reformar las pensiones siempre ha sido impopular (…), pero entre los sondeos a corto plazo y el interés general del país, elijo el interés general del país“.
Macron dijo que respetar las multitudinarias manifestaciones convocadas por los sindicatos, pero rechazó tanto los actos violentos como los bloqueos de sectores económicos: “No podemos aceptar ni facciosos ni bandos”.
“Vamos a continuar avanzando a marchas forzadas”, dijo Macron, que anunció nuevas políticas en el ámbito de la educación, la sanidad y la ecología, además de un mayor gasto en seguridad y en defensa.
Sus palabras recibieron el rechazo unánime de la oposición, que le acusó de no responder a la fractura social provocada por su reforma de las pensiones.
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