La diócesis italiana de Teano-Calvi estableció que los sacerdotes que no estén vacunados contra el COVID-19 no podrán dar la comunión. Además, se limitaron las actividades de las parroquias debido a la difusión de la variante Ómicron.
La disposición prohíbe “la distribución de la Eucaristía por parte de sacerdotes, diáconos, religiosos y laicos no vacunados”. Asimismo, establece que se suspende “toda actividad pastoral, catequística y formativa presencial”.
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“Durante la celebración, las hostias sobre el altar deben mantenerse estrictamente cubiertas en los vasos sagrados previstos”, señala la circular emitida por el obispo Giacomo Cirulli, según informaron medios locales.
En su mensaje, el obispo Cirulli recordó las palabras emitidas hace algún tiempo por el papa Francisco y aseguró que “vacunarse con dosis autorizadas por las autoridades competentes es un acto de amor”.
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El obispo de Teano-Calvi se une al obispo de Salerno, Andrea Bellandi, quien emitió una disposición similar que instaba a los sacerdotes a cuidar rigurosamente las medidas sanitarias y prohibía a los sacerdotes antivacunas dar la comunión.
Italia alcanzó su récord de contagios el pasado jueves, cuando las autoridades informaron 220 mil nuevos casos en un solo día. Actualmente, los casos totales del país superan los 7 millones, mientras que los fallecidos se acercan a los 139 mil.
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