La seguridad en la minería es vital, es una forma de mantener protegida la vida de los trabajadores. Sin embargo, lo ocurrido en la mina San José, aún permanece latente en la memoria de los chilenos.
Aquel derrumbe ocurrido en 2010, en la quedaron atrapados 33 mineros, fue un puntapié para generar nuevos cambios en el reforzamiento de la seguridad industrial.
El director nacional (s) de Sernageomin, David Montenegro, detalla que el reforzamiento de la seguridad ha revelado un gran avance en la reducción de la fatalidad en los últimos 10 años, específicamente un 75%.
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Sernageomin detalla que a partir del 2010, sus fiscalizaciones se han quintuplicado, ya que para las familias de los trabajadores que fallecen allí, “no es un porcentaje, es un todo”.
“Una identificar el peligro, dos evaluar el riesgo y tres tomar las medidas de control. Muchas veces esas tres cosas se saben, pero por alguna razón no se aplican. Entonces ahí empezamos a hablar de un tema cultural y eso es lo que hemos tratado de inculcar en el último tiempo”, agregó.
Dentro de esta línea, el Subsecretario de Minería, Willy Kracht, detalló que han puesto énfasis en la seguridad minera.
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“Las personas que acceden a este programa pueden utilizar estos recursos para mejorar la seguridad de las faenas. Por ejemplo, invertir en fortificaciones, accesos más seguros u obras de esa naturaleza”, dijo.
Desde la cartera adelantan que trabajan en que todos los programas para la pequeña minería puedan tener un enfoque claro en seguridad.
La tecnología no es ajena a estos cambios, ya que al alcance de la mano de cualquier minero pueden acceder desde su teléfono inteligente a la aplicación Minería Contigo, una que cuenta con el apoyo de SONAMI, y entrega herramientas para el cuidado, seguridad, salud y bienestar para la pequeña minería.
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