Luego de la visita de la ministra del Interior, Izkia Siches, a la Región de La Araucanía junto al general director de Carabineros, Ricardo Yáñez, y ministros de diversas carteras que terminó con incidentes en su intento por ingresar a la comunidad autónoma de Temucuicui, invitada por Marcelo Catrillanca, padre del asesinado comunero Camilo Catrillanca.
CNN Chile conversó al respecto con Richard Caifal, director ejecutivo de la Fundación Rakizuam y quien fuera el primer gobernador mapuche de Cautín, designado durante el gobierno de Sebastián Piñera.
Consultado por su visión, y la de la fundación que representa, respecto a la situación de la denominada macrozona sur, así como la propuesta que ha llevado el nuevo gobierno, Caifal indicó que “tenemos un análisis desde la vivencia, yo soy parte de una comunidad indígena, nací y me crie allí; hoy encontramos gravísima la improvisación, la desprolijidad, el desconocimiento de la zona y la realidad actual”, agregando que “nos preocupa la falta de una agenda clara en materia de políticas indígenas, que es algo que ha aflorado en estos lamentables episodios que obviamente condenamos porque son hechos de violencia”.
“Nosotros le decimos a la ciudadanía, así como al resto de los líderes políticos y sociales, que es urgente y necesario condenar todo tipo de violencia; al parecer hay gente que solo condena la de un lado, no, no hay que ser ambiguos ni ser tibios en ese tipo de aclaración”, consignó el director de Rakizuam.
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Consultado por su experiencia como gobernador de Cautín, así como la gestión del gobierno de Sebastián Piñera, donde crecieron los delitos, incendios y tomas en la zona, Caifal contestó que “hay que señalar que no fuimos ambiguos como otros sectores en condenar la violencia“, sosteniendo que en el trabajo en la región es también importante “abogar por el reconocimiento de los derechos de los pueblos indígenas“, ya que “la temática indígena no se puede reducir solamente a Temucuicui, lo que es un error del gobierno que está entrando; hay que recordarle a la gente que en La Araucanía hay más de 3 mil comunidades indígenas“.
Su argumentación respecto a las acciones del nuevo gobierno fue que “el mensaje que se pretendió dar tenía más bien un efecto comunicacional, no vimos una agenda clara y contundente para avanzar en el reconocimiento derechos”. Por otro lado, respecto a qué atribuye el fracaso de los gobiernos anteriores en la región, Caifal reconoció una “falta voluntad política“.
En cuanto a las gestiones realizadas durante la administración de Piñera por el entonces ministro Alfredo Moreno, quien había efectuado conversaciones con distintos actores, incluyendo con parte de la comunidad Mapuche, Caifal destacó que “valoramos mucho su trabajo, actuó con mucha cautela y prudencia, silenciosamente, sin llevar a los medios de comunicación“.
Finalmente, sobre las prioridades que considera debería tener el gobierno para avanzar en la situación, sostuvo que “el primer aspecto es recuperar las confianzas, una escucha activa, no solo pretender imponer una agenda de trabajo desde Santiago, y sobre todo desestimar la violencia“.
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