Los fanáticos del K-pop esperan ansiosos el SMTOWN Live, el importante festival que se desarrollará los días viernes 18 y sábado 19 de enero en el Estadio Nacional.
Se trata de un fenómeno que para muchos es incomprensible, excepto para Constanza Jorquera, académica del Centro de Estudios Coreanos de la Universidad de Santiago y experta en Hallyu u ola coreana.
En entrevista con 360°, Jorquera explicó que el éxito de las bandas coreanas viene del trabajo que hacen agencias, el mismo Estado, las empresas y los productores, quienes “son capaces de articular distintos temas, como la cultura coreana en sí misma, y también se puede hibridar con temas más occidentales, con el tema de la música, los colores y la estética”.
En el caso de Chile, particularmente, el proceso de identificación puede ser más intenso porque vemos a Corea del Sur como un país “que salió de la pobreza, que gracias al esfuerzo, el trabajo duro y la educación, pudo salir adelante, y eso genera cierta esperanza, identificación y sueños por parte de los fanáticos“.
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Fundamental para la segunda ola coreana, alrededor de 2007, fue el boom de las redes sociales, que permitieron globalizar el fenómeno de los K-Dramas (series televisivas coreanas) y el K-pop. “Cada vez más las industrias de entretenimiento coreana, los grupos, las bandas, los actores, son capaces de utilizar Internet como plataforma principal. No sólo redes sociales, sino que también plataformas propiamente coreanas donde puedes pagar y puedes tener acceso a contenido exclusivo. Genera este vínculo más de intimidad con los idols“, explicó la académica.
“Los idols no son solamente cantantes o bailarines, también son actores, modelos, embajadores culturales, incluso. Entonces son bastante integrales”, señaló la experta.
Y es que una de las cosas que más llama la atención es el proceso de encantamiento, durante el cual “te haces fan de estos grupos, van creciendo los idols y vas generando estos vínculos afectivos“.
El SMTOWN Live es un festival que hasta hace poco se hacía sólo en Asia, Estados Unidos y algunos países de Europa. “Nunca hubiéramos pensado que en América Latina y en Chile se pudiera hacer y tener estos grupos que están en lo top, no están en decadencia“, comentó Jorquera.
¿Es moda o llegó para quedarse? La respuesta, según la académica, es que “es algo que llegó para quedarse, pero depende del manejo que le pueda dar el gobierno coreano, las empresas coreanas, y cómo se da la retroalimentación con las universidades, las empresas y los gobiernos en el caso de Chile. Si ese círculo virtuoso se sigue manteniendo, puede tener mucha más proyección“.
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