Chile se encuentra en pleno camino al proceso constituyente, en donde el próximo 25 de octubre los ciudadanos podrán elegir si desean o no una nueva Constitución.
En caso de ganar la opción Apruebo, habrá elecciones para elegir al órgano que deberá redactarla, ya sea una convención constituyente o una mixta. En estos casos, la mitad de los redactores deberán ser hombres y la mitad mujeres.
Sin embargo, aún no se ha resuelto cómo estarán representados los nueve pueblos originarios que componen Chile, los cuales representan casi el 13% de la población, según cifras del último Censo. Al respecto, Matilde Burgos conversó con Delia Condori, consejera nacional Aymara de Putre.
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“Este proceso es muy importante para nosotros como pueblos, porque es la oportunidad que tenemos para poder participar y lograr que haya un reconocimiento constitucional a los pueblos preexistentes de la nación chilena (…) nosotros podemos aportar y construir, en colaboración con el Estado de Chile, un país más inclusivo, donde se tenga la mirada de los diferentes pueblos”, manifestó Condori.
Respecto a lo que debiera consagrar esta eventual Carta Magna, la consejera manifestó que lo primero es que “aparezca el reconocimiento constitucional a nuestros pueblos, a eso hay que sumarle otro tipo de leyes que hagan efectivo este derecho”.
“Hoy día existe una negación dentro de la Constitución hacia los pueblos, a pesar de que estamos dentro del Estado de Chile (…). El Estado no ha tenido la voluntad de trabajar efectivamente en el desarrollo, inclusión y trabajo colectivo de las comunidades con el Estado chileno. Creemos que es una tremenda oportunidad de trabajar y construir algo más inclusivo para todos”, enfatizó.
Condori sostuvo que, para ellos como Aymaras, uno de los puntos importantes a considerar es que “en el país, el pueblo mapuche ha impuesto de alguna manera todas sus demandas, reivindicaciones y los hechos que les suceden, pero existen otros ocho pueblos que tiene su propia historia. Nos hemos sentido invisibilizados”.
“Aparte de la invisibilización estructural hacia los pueblos, también hay uno de todos los medios. Siempre los discursos hablan del pueblo mapuche, no se habla del pueblo Aymara, Quechua, Diaguita, etcétera. (…) claramente eso es una labor de todos, no digo solamente del Estado, sino que los medios de comunicación y organizaciones”, agregó.
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En cuanto a un eventual padrón electoral propio para los pueblos originarios, la consejera criticó las propuestas de algunos parlamentarios del oficialismo respecto a este, ya que “presentaron un tipo de determinación de los escaños que tiene que ver con un padrón electoral indígena que hoy no existe, (que debe armarse) en un plazo de 30 días y dependiendo de eso determinarlos y eso es inviable”.
“Eso de darnos a nosotros exigencias que al resto de los chilenos no se les entrega no corresponde. Es una discriminación arbitraria que hace que nuestra población se vea impedida de participar como corresponde“, remarcó.
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