Por Mónica Rincón
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Publicado por pazarancibia

El acuerdo al que se llegó para una nueva Constitución, no fue fácil. Las caras de ese día lo revelan así.

Hoy enfrenta dificultades porque, por ejemplo, se discute qué pasa si no se llega a acuerdo de 2/3 sobre una materia, dado que se acordó que se escribirá sobre una página en blanco y, por lo tanto, el vacío en esas materias no podría llenarse con la antigua Carta Magna.

La postura del senador Andrés Allamand (RN) acerca de que si no hay acuerdo total, la Convención Constituyente fracasa, hizo saltar las alarmas.

El diputado Boric (CS) lo acusó de defender la norma del 80. Otros, como el senador Harboe, lo llamaron a que mejor vote No y Enna Von Baer dijo que en lo que no haya acuerdo, es cierto que regiría ley simple.

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Me parece que no es momento de poner en riesgo un acuerdo que aunque insuficiente para una parte de los ciudadanos, de igual manera podría darnos lo que nunca hemos tenido: una Constitución escrita en democracia y con participación de todos y todas.

Es tiempo de abrir a más gente esta discusión. Es hora de asumir que no hay más plazos, peleas chicas, ni bloqueos y que deben ser los ciudadanos en las urnas quienes determinen la composición de la instancia que redacte la norma bajo la cual se desarrolla el marco de nuestra vida republicana.

Es momento de actuar con sentido de urgencia y no sólo empujar por este acuerdo, sino por otras soluciones en materia social que nos lleven a solucionar diversas demandas y urgencias para que nadie en Chile se siga quedando atrás. DDHH, pensiones, salud están ahí sobre la mesa, porque los ciudadanos están más atentos que nunca a cómo actúan nuestras autoridades y no merecen ser defraudados.

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