Uno de los detalles que no pasó inadvertido durante el capítulo de este domingo de Game of Thrones, “The Last of the Starks”, fue un llamativo elemento que apareció en una de las escenas y que era disonante con respecto a la ambientación de estilo medieval de la serie.

Fue cerca del minuto 14 del cuarto episodio de esta última temporada cuando las cámaras mostraban cómo todos los sobrevivientes de la Batalla de Winterfell celebraban con un festín y brindaban en una mesa encabezada por Daenerys Targaryen.

En ese momento, mientras la Reina Dragón observaba cómo Jon Snow conversaba con algunos de sus amigos, la toma permitió ver que había un vaso de café con tapa blanca al frente de ella, entre medio de las velas, platos y jarrones antiguos. 

Los seguidores de la serie que lo notaron comentaron el asunto a través de redes sociales, donde criticaron que HBO haya cometido este visible error, considerando el gran presupuesto y detallismo que la producción maneja. 

 

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