ARCHIVO / AGENCIA UNO

Este martes, la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA) confirmó que Argentina, Uruguay y Paraguay serán sedes de los partidos inaugurales del Mundial de Fútbol que se disputará en 2030, excluyendo a Chile de la cita mundialista. Este hecho generó diversas críticas a la organización y escaló hasta el Palacio de La Moneda.

Según informó Radio Biobío, el presidente Gabriel Boric llamó a su par argentino, Alberto Fernández, para averiguar qué ocurrió en el proceso que llevó a que Argentina, Uruguay y Paraguay fueran seleccionados como sedes, mientras que Chile quedó excluido.

La respuesta de Fernández fue directa, indicando que se desligan de toda responsabilidad y que la decisión de la FIFA fue tomada de manera independiente.

A su vez, tras la exclusión, el ministro de Deporte, Jaime Pizarro, confirmó que no estaban en conocimiento de esta decisión y que debido a esto, la Corporación Juntos 2023 tendrá una reunión de sus miembros en la que se definirá el curso de la corporación.

Desde la corporación, el secretario ejecutivo, Michael Boys, explicó que “en la comunicación de FIFA no hay ningún tipo de desmedro o descrédito hacia Chile. No hay ninguna mención de Chile en la documentación”.

Agregando que “no es que Chile sea excluido del proceso, sino que se establece un formato en el que estos partidos conmemorativos se desarrollan en Uruguay, Argentina y Paraguay”.

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