Luego de fallecer a los 103 años, la herencia material de Nicanor Parra -que comprende todos sus bienes muebles e inmuebles- fue repartida entre sus 6 hijos.
Colombina, la hija menor, quedó como albacea y administradora de un 58,3% del testamento, lo que generó que Catalina y Alberto no quedaran del todo conformes.
Cabe señalar que entre la repartición se encuentran las casas en Isla Negra, Conchalí, Las Cruces y La Reina. Esta última tiene un avalúo fiscal que alcanza los $765 millones.
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Mientras la propiedad en Las Cruces fue “sellada” el 26 de octubre pasado, se espera algo similar para su casa en La Reina.
“El legado de Parra está amenazado. La casa que custodia sus bienes en La Reina será sellada esta semana“, dijo Jorge Meneses, abogado de Catalina y Alberto, consigna El Mostrador.
Colombina Parra respondió: “El legado no está para nada amenazado, todo lo contrario, está súper vigilado por cuidadores, alarmas y por un inventario que se ha estado haciendo estos meses”, asegura La Tercera.
Cabe recordar que en el litigio que enfrenta a los hijos de Parra, Catalina y Alberto han asegurado que en el momento en que el poeta firmó la herencia -año 2017-, este se encontraba con “las facultades mentales aminoradas”.
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