“Creemos que América no es un continente pobre, es un continente rico, el tema es que somos un continente desigual en donde pocos tienen mucho y donde muchos tienen muy poco“.
Así parte su radiografía sobre nuestra región Waleska Ureta, directora social de América Solidaria Chile, quien analiza la desigualdad de nuestro país y los vecinos, pero no sólo en materia económica, sino también de género.
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“Trabajamos en mostrar la realidad del continente, de Chile, lo que están viviendo las mujeres, los niños, las personas que están en situación de desigualdad y vulneración, y más aún la situación que viven los niños, las niñas y las mujeres del continente respecto de la desigualdad de género”, explica.
Es por lo anterior que es una voz autorizada para destacar que “este es el continente más violento del mundo, las mujeres somos asesinadas, somos violentadas en gran medida por las mismas estructuras, desde la casa hasta la estructura política”.
“Deciden por nuestros cuerpos, deciden nuestros sueldos, deciden que es lo que tenemos que hacer, cómo nos tenemos que vestir. Creo que la deisgulad social se acrecenta por la desigualdad de género también”, añade.
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Además, expone un dato revelador de los puestos que poder que ocupan los hombres y dónde están sus intereses: “En el mundo social hay muchas más mujeres y eso ha permitido permear y que hayamos podido ocupar espacios de poder de la fundación. Actualmente de cinco direcciones de equipos, cuatro son ocupados por mujeres“.
Es por eso que se preguntan por qué los hombres no están en el mundo social, ya que solo uno de cada tres postulantes como voluntarios son hombres.
Por otra parte, ve a “las mujeres con mucha carga en la casa, con mucha carga de poder conseguir el sustento de sus familias, vemos los caso de migracion que en general cuando los hombres salen a buscar oportunidades, son las mujeres las que se quedan a cargo de sus familias”.
Es por todo esto que apunta que “necesitamos un nuevo contrato social que permita que la desigualdad la superemos como continente, como país, y sobre todo como país. Deberíamos avergonzarnos, no podemos sentirnos orgullosos del nivel de desigualdad que tenemos“.
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