En el marco del Congreso Futuro 2024, Kate Crawford, reconocida experta en ética y tecnología, hizo eco de las preocupaciones expresadas por líderes tecnológicos sobre un riesgo inminente que no es la guerra, la pobreza o el cambio climático, sino la inteligencia artificial general (AGI).
En primera instancia, Crawford destacó la paradoja inquietante de que “aquellos responsables de construir la IA son también los emisores de las mayores amenazas”.
La AGI, una forma de inteligencia artificial más avanzada y capaz, se “postula como una maquinaria futura que podría destronar a la raza humana”. Sin embargo, Crawford señala “que la IA actual está exacerbando la desigualdad y acelerando la crisis climática, destacando cómo los recursos intensivos de la IA impactan en la humanidad” y plantean la amenaza de que “los sistemas construidos por multimillonarios cambien el equilibrio democrático global sin restricciones“.
La experta resalta el surgimiento de la IA generativa, que en solo 12 meses ha transformado flujos y modelos, influyendo en la valoración del trabajo humano mes a mes. Crawford advierte “que la sociedad está experimentando un cambio en la percepción de dónde encajan los humanos en esta cadena evolutiva“.
Explotación exacerbada de recursos
Tras viajar por todo el mundo durante cinco años para presenciar la extracción de recursos naturales que alimentan la IA contemporánea, Crawford enfatiza la necesidad de comprender las amenazas que enfrentamos, advirtiendo “sobre la escazes ya visibles en la corteza terrestre, especialmente en el agua, debido al frenesí por minerales críticos“.
En relación con el litio, destaca la batalla geopolítica en Chile. “El presidente Boric ha lanzado una estrategia para dar al gobierno control sobre el litio, lo que plantea preguntas complejas sobre las responsabilidades y partes interesadas en esta lucha por los recursos”.
Crawford también aborda las emisiones de carbono, señalando el aumento en las demandas computacionales debido a la AGI y los centros de datos. “Chat GPT y otros chatbox consumen más de lo previsto, con cada interacción utilizando más de 10 veces la energía de una búsqueda web“, afirma la especialista.
La experta revela preocupantes “cifras de aumento en el uso de agua por parte de gigantes tecnológicos como Microsoft y Google, señalando que las ciudades con centros de datos están empezando a preocuparse por los impactos en sus suministros de agua“.
En esa línea, Crawford adviertió sobre el proceso de “abstracción, extracción y distracción” en la industria de la IA, donde la sociedad está siendo distraída por mitos y novedades, mientras la crisis crece en la sombra.
El peligro que la IA representa para la democracia
Finalmente, Crawford habló sobre los riesgos que esta nueva tecnología representa para la sociedad. Fue así que afirmó que “en este próximo año, la mitad de la población va a votar. Eso son más de 70 países con muchos habitantes que van a elegir nuevos líderes. Muchos de estos países ya son puntos importantes, como las tensiones de Rusia y Ucrania. Pero este momento histórico ve una nueva forma caótica que se puede producir contenido de manera instantánea, que es completamente creíble, y eso hace que no podamos distinguir entre lo que es real y no lo es, y eso nos hace vulnerable a nuevas formas de manipulación”.
“La concentración de tanto poder de decisión, en las manos de tan pocos, especialmente en plataformas que son esenciales para la comunicación pública y las elecciones, esto va más allá de las típicas amenazas de desinformación y verdad falsa. Porque esto involucra a toda la regulación de la información“, cerró la experta.
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