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Tardó casi un minuto en darse cuenta que estaba haciendo el ridículo.
– Cachorro no supo reaccionar contra una mini calabaza
La misión no era tan fácil, pero la instrucción bastante simple: balancear un huevo sobre su cabeza.
Cuando creía que lo estaba haciendo perfecto, se dio cuenta que fue derechamente engañado, ya que sus amigos usaron pegamento para asegurarse de que no se lo pudiera sacar. Sólo le quedó reír y salir del lugar derrotado.
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