Pigeonly es una de al menos tres aplicaciones, todas lanzadas por ex convictos, que han cambiado para siempre las comunicaciones entre el interior y el exterior de las cárceles en Estados Unidos.

Según señala Bloomberg, las prisiones norteamericanas se han logrado mantener como espacios muertos para la tecnología, en que los internos tienen la posibilidad de comunicarse mediante anticuados computadores que no incorporan servicios de mensajería.

Las cerca de 2,3 millones de personas que se encuentran tras las rejas comienzan poco a poco a aumentar sus posibilidades en relación a comunicarse con sus seres queridos.

Postal enviada a una interna. Foto: Ryan Collerd/Bloomberg.

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Flikshop es otra aplicación que ha sido llamada, comúnmente, como el “Instagram de las prisiones”. Marcus Bullock, creador de la app, aseguró que en la “cárcel el correo es la mejor parte del día, todos los días”.

Sin embargo, en la actualidad no es tan común recibir una carta. La mayoría de las personas se comunican a diario a través de una u otra aplicación. A raíz de esto, Bullock consideró que el envío de imágenes era fundamental.

La aplicación ayuda a generar una postal de menos de un dólar, en la cual la persona desde afuera captura una fotografía, escribe un texto y lo envía a la cárcel en forma de tarjeta.

Esto también ha sido percibido como una forma de evitar la reincidencia de los reos, pues al mantener un contacto más visible con el exterior pueden sentir que hay vida fuera de la prisión.

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InmateAid es otra de las aplicaciones que han servido como vía de comunicación entre familiares e internos. Por una suscripción mensual de 8,95 dólares (unos $5.800), la plataforma te permite, por ejemplo, hacer llamadas más baratas que el sistema tradicional de la prisión.

¿Cómo han sido recibidas por las cárceles? Muchas de estas lo comenzado a utilizar como una herramienta más. La cárcel del condado de Lancaster en Pensilvania decidió cortar de raíz el envío de tarjetas, pues estas llegaban bañadas en drogas sintéticas. Esto, a menos que sea enviada a través de Pigeonly.

Tammy Moyer, directora del establecimiento, asegura esta nueva aplicación ha sido una ganancia para ambos lados.

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