El EMDR es una terapia que ha ganado popularidad en los últimos años gracias a su efectividad en el tratamiento del trauma. La psicóloga clínica EMDR, Ana Lucas, explicó en Sana Mente que esta terapia consiste en estimulación bilateral y ayuda al paciente a reprocesar la información.
Durante la terapia, el paciente mueve sus ojos de lado a lado mientras el terapeuta lo guía para que procese la información que le causa malestar emocional.
“El trauma es cualquier experiencia que nos deja una huella emocional que no podemos gestionar” en un momento determinado, detalló Ana Lucas.
La terapeuta indicó que en estos casos, el cerebro nos deja una señal de alarma que a lo largo de nuestra vida nos marca. Sin embargo, el EMDR busca poner a la persona a procesar esa situación para que el cerebro pueda pensar de manera más clara.
La terapia de EMDR permite acceder al sistema límbico, el área del cerebro que se encarga del miedo y la alarma. Durante la terapia, la parte que utilizamos para hablar, para pensar lógicamente, se cancela y se entra en el sistema límbico para poder trabajar con las emociones y las memorias traumáticas.
Además, busca amortiguar la huella emocional que dejó el trauma en el pasado. Al conectar neuronas y procesar las emociones, el paciente puede desarrollar las habilidades que no tuvo en el momento del trauma y curar la herida. La terapeuta destacó que esta terapia es muy efectiva y ayuda a que el malestar emocional baje.
Una de las principales ventajas del EMDR es que una vez que se aprende cómo funciona el cerebro y su potencial, es algo que se lleva contigo a lo largo de la vida. La terapia de EMDR es una herramienta efectiva para sanar el trauma emocional y desarrollar habilidades emocionales.
“El cuerpo tiene la capacidad de curarse a sí solo, nos hacemos una herida y se cura sola. El cerebro es lo mismo”, detalló.
En la consulta, los terapeutas de EMDR enseñan a los pacientes a leer sus emociones y a entender qué les está pasando. La terapeuta explica que esto es fundamental para poder procesar el trauma emocional y para que el paciente pueda desarrollar habilidades emocionales que le permitan gestionar sus emociones de manera más efectiva.
En definitiva, la terapia de EMDR es una herramienta efectiva para procesar el trauma emocional y desarrollar habilidades emocionales. La terapeuta destaca que esta terapia permite amortiguar la huella emocional que dejó el trauma en el pasado y desarrollar las habilidades que no se tuvieron en el momento del trauma. Además, el EMDR permite que el paciente aprenda a leer sus emociones y a entender qué le está pasando para poder gestionarlas de manera más efectiva.
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