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Axel Kaiser, presidente de la Fundación para el Progreso, estuvo en Última Mirada para analizar la situación política en Chile y comentar el lanzamiento de su nueva novela épica El libro de Asgalard: La travesía de Valah.

El abogado proyectó que el escenario político nacional “se va a seguir moviendo hacia la derecha”, sin embargo, aunque “Republicanos legítimamente y honestamente quiere redactar una constitución para Chile”, el Consejo Constitucional “está en una situación complicada”.

¿Por qué? “A mi modo de ver, se va a rechazar la nueva Constitución que propongan. Yo creo que José Antonio Kast está sobreestimando su capacidad de convocatoria y de darle vuelta la opinión a los ciudadanos en Chile. Y hay un voto de castigo, creo, también, a la clase política en general (…). Hay un hastío que se explica porque no se están resolviendo problemas que son urgentes de manera concreta”, aseguró.

En esa línea, ejemplificó con las discusiones en torno a las pocas expectativas por la economía y el alza de la criminalidad. El filósofo aseguró temer que, “en algún minuto, ni siquiera Republicanos sea lo suficientemente duro para representar las soluciones que reclama la ciudadanía. Y que tengamos ese ‘que se vayan todos’ o que llegue un Bukele (…). Cuando las personas no ven en el sistema democrático la solución a problemas que tienen, buscan una alternativa”.

A 50 años del golpe de Estado, “sería una pena seguir pegados en esto”

Kaiser también se refirió al legado de los arquetipos políticos de Augusto Pinochet y Salvador Allende en la ideología chilena.

“Tenemos ese marco mental de que somos una sociedad de enemigos y eso a mí me parece muy preocupante, muy peligroso y muy insano, porque impide todo. Impide la convivencia pacífica civilizada. Además, la polarización se toma todo el escenario, toda la discusión, y tampoco puedes opinar nada que salga de una cierta línea, porque te cancelan, te expulsan. Como le pasó a Patricio Fernández: puede ser alguien de izquierda, pero tienes un matiz y entonces, se te viene encima una jauría y te destroza. Y eso es muy poco civilizado”.

Sostuvo, además, que le resulta más prioritario “que nos preocupemos más de cuidar la democracia que tenemos ahora y para adelante, que obsesionarnos mucho -con todo lo necesario que es tener la discusión- con todo lo que pasó para atrás, que lo venimos haciendo hace tiempo (…) Ahora son 50 años, pero van a ser 100 y sería una pena seguir pegados en esto 50 años más. Nos gusta pelear a los chilenos y como que nos aferramos a eso, porque nos da sentido”.

Finalizando, el doctor en Filosofía presentó su nueva novela, El libro de Asgalard: La travesía de Valah, primera incursión del autor en el género de la fantasía épica y en torno a la cual espera escribir una trilogía. Su temática principal yace en “esta lucha entre la libertad y la opresión, que suele estar muy relacionada con el conflicto del bien y el mal dentro de la mitología nórdica“.

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